Tal parece que los detractores y partidarios del llamado “deshielo” en el seno del exilio cubano, comienza a dividir esta comunidad política organizada por varias instituciones que tienen un sólo fin, acabar con el castrismo.
Falta poco para conocer la decisión de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, con respecto a cuál será el futuro de las políticas con Cuba impulsadas por su predecesor, Barack Obama.
Según un artículo publicado por la agencia EFE, varias organizaciones comienzan a tener roces por su posición con respecto a si se debe o no terminar con los beneficios que otorga Estados Unidos al régimen de Cuba en la figura de intercambio comercial.
Si bien se sabe, la apertura estadounidense ha traído pocos beneficios al pueblo cubano, la represión contra opositores viene en crecimiento y los beneficios económicos son escazos.
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Humberto Díaz-Argüelles, presidente de la Brigada 2506, expresa que las concesiones son un premio para la dictadura y un irrespeto para las victimas.
“Las concesiones de Obama fueron una falta de respeto a 57 años de dictadura, un premio a décadas de dictadura férrea y brutal”
Para él, todo es una “farsa” y una “burla” ya que, a pesar del acercamiento, los estadounidenses aún no pueden viajar libremente a Cuba mientras el régimen de aprovecha de todo.
“Todo es una farsa completa y, mientras, el régimen castrista sigue pisoteando los derechos humanos, la libertad del pueblo cubano y negándole a los ciudadanos elecciones libres no controladas por el Partido Comunista”
Orlando Gutiérrez, director del Directorio Democrático, aseguró que Obama se equivocó al negociar con Raúl Castro sin exigirle ningún tipo de cambio.
“La prioridad para, sigue siendo el restablecimiento de la libertad y la democracia como objetivo de la política estadounidense hacia Cuba”.
Un compromiso que, a juicio de Gutiérrez, pasa por dar marcha atrás en las “concesiones unilaterales” hacia Cuba y en la “apertura económica que se ha hecho sin que el régimen conceda nada”.
Seguir con las políticas ¿bienestar para el pueblo cubano?
Por el contrario, el grupo The CubaOne Foundation, integrado por jóvenes cubanoamericanos, pidió en una carta al mandatario que no vuelva a la Guerra Fría y tenga como “norte” de su política hacia Cuba los intereses estadounidenses y el bienestar del pueblo cubano.
Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia y contrario al embargo sobre la isla, opinó que, de producirse algún tipo de restricción en el comercio y los viajes, no debería afectar las relaciones “de pueblo a pueblo, familiar y de flujo tecnológico”.
“la inversión estadounidense en Cuba debe favorecer al pueblo cubano y no solo a la dictadura, por lo que los militares cubanos no deben ser los únicos enriquecidos y fortalecidos económicamente”.
En este contexto, un sondeo publicado este lunes por Engage Cuba Coalition desmonta el estereotipo de que los republicanos se oponen a las políticas implementadas por Obama en relación con la isla. De hecho, la mayoría de los votantes republicanos quiere mantenerlas.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de EFE
