A partir de mediados de agosto, el Instituto de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos dejará de operar en la Casa Bacardí de la Universidad de Miami según informó al Nuevo Herald su director, Jaime Suchlicki.
Suchlicki, se mantendrá en el cargo hasta el 15 de agosto, según dio a conocer a través de un comunicado publicado el pasado viernes por la Universidad de Miami.
“La Universidad de Miami agradece a Jaime Suchlicki su extraordinario servicio a esta casa de estudios y a la comunidad de Miami”, dijo el presidente de UM, Julio Frenk. “Él ha dedicado su carrera al estudio de Cuba y ha compartido su gran experiencia con generaciones de estudiantes, académicos y miembros de nuestra comunidad”.
Según indicó Suchlicki su salida “no se trata de un retiro”, sino de una “renuncia” por presuntas diferencias con el presidente Julio Frenk sobre el futuro de los estudios cubanos en esa institución.
“ICCAS lo voy a recrear en otro lugar, posiblemente en el Museo de la Diáspora Cubana y el personal se va conmigo”, añadió.
El centro no dependía de la Universidad, era autofinanciado y no pagaba alquiler en la Casa Bacardí.
Reseña El Nuevo Herald , que dentro de los planes de UM estarían la consolidación de varios centros en un Departamento de Estudios Latinoamericanos y el fortalecimiento de relaciones institucionales con universidades cubanas, con programas similares a los que tienen ya varias universidades estadounidenses, muchos impulsados por el deshielo de las relaciones con Cuba promovido por el entonces presidente Barack Obama.
La Universidad de Miami por su parte dio a conocer en el comunicado que realizará una búsqueda para contratar a un académico experto en el campo de los estudios cubanos y cubanoamericanos “para continuar la investigación y la colaboración con sede en la Casa Bacardí”.
La Casa Bacardí, cuyo concepto fue una casa cultural cubana, se logró mediante una donación de la Fundación Familia Bacardí y abrió sus puertas tres años después de la creación de ICCAS en 1999. La compañía no contestó inmediatamente una petición de comentario.
Reseña el comunicado que la Casa Bacardí “juega un papel importante tanto en la promoción de una mayor comprensión de los problemas cubanos contemporáneos como en servir de lugar de encuentro para la comunidad cubanoamericana, y proporcionará valiosos aportes en esta importante búsqueda”.
“La Casa Bacardí se había convertido en un templo cultural de Miami y el centro [ICCAS] en uno de los más importantes centros académicos sobre Cuba, posiblemente en el mundo”, señaló Suchlicki, quien deja también la cátedra Emilio Bacardí en el Departamento de Historia de esa universidad.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de El Nuevo Herald