La crisis de fármacos e incluso de envases mantiene a las farmacias cubanas en una crisis constante. A pesar de que el pasado 7 de julio, medios del régimen se hicieron eco con la inauguración de una planta para producir contenedores para medicamentos, la realidad golpea al cubano de a pie que sufre para conseguir medicamentos.
Un reportaje del portal CubaNet, refleja que los medios del Estado cubano sólo se concentran en resaltar los logros del Centro de Inmunología Molecular y el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de La Habana, criticando además que en Cuba sólo se producen medicamentos para exportar obviando necesidades básicas de los cubanos
“A los aclamados logros del Heperprot P y la vacuna contra el cáncer de pulmón, se contrapone la escasez de analgésicos, relajantes musculares, antibióticos, colirios, ungüentos, vitaminas, tabletas intravaginales y casi todo lo que un facultativo puede prescribir a sus pacientes, incluyendo los fármacos controlados”, dice parte del reportaje
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Supone que el régimen intenta explotar los pocos logros científicos para tapar la falta de medicamentos básicos, colocándose ante la mirada internacional como un país abastecido de medicinas, pero nada más lejos de la realidad.
“Lo cierto es que no solo crece el vacío en los anaqueles destinados a las ventas de medicinas, sino que muchas farmacias han cerrado, generando molestias a los vecinos y propiciando el crecimiento de nuevos basureros que atraen plagas y pestilencias, además de enfatizar la fealdad urbana”.
Pero la crisis de farmacos se extiende por todo el territorio nacional. Incluso en municipios populosos como Habana Vieja y Centro Habana, los ancianos deben caminar kilómetros para encontrar sus pastillas, cuando anteriormente sólo debían doblar la esquina.
Mercado negro
Sin embargo, en el mercado negro la historia es otra. Allí consigues de todo pero a un precio sumamente elevado.
Las tiendas comercializadoras en divisas no son una opción para quienes cobran apenas 20 CUC mensuales (18 USD), mucho menos para los jubilados.
El régimen se mantiene incapaz de producir lo que el pueblo necesita, pero en las farmacias internacionales también se consigue medicamentos, pero los precios son los mismos.
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En las farmacias internacionales, por ejemplo, una sola caja con cinco dosis inyectables de Complejo Vitamínico B cuesta 18,35 CUC; un producto que en México tiene un valor de 60 pesos (alrededor de 4 USD).
Cada farmacia cerrada es hoy un establecimiento abandonado, convertido por los vecinos en un vertedero de basura que desluce cualquier intento por embellecer y adecentar el paisaje urbano. Para quienes presencian a diario semejante desastre, es difícil comprender qué tan necesaria es la planta fabricadora de envases inaugurada en Pinar del Río.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de CubaNet
