Gerti Muho, abogado, derrochó dos millones de dólares en apuestas, viajes y viviendo en un lujoso apartamento en el Downtown de Miami, además de desplazarse en un Maserati último modelo, tras adquirir dinero robando información personal y financiera.
El par de millones de dólares los obtuvo cuando trabajaba en una empresa en Nueva York, en 2013, cuando lo despidieron del fondo de inversiones Fletcher Asset Management (FAM), en donde prestó servicios como gerente por un lapso de 10 meses, según dio a conocer hoy la Fiscalía Federal del distrito sur de Florida.
Tras su despido este se llevó consigo una copia de datos e información sensible de la computadora del servidor de la compañía, los que habría utilizado en los años siguientes, para obtener préstamos bancarios falsos, según el reporte judicial.
En agosto de 2013 logró obtener un préstamo de $2 millones, de un banco en Mónaco, cantidad del que fue “capaz de transferir rápidamente 1.6 millones a varias cuentas sin que nadie lo detectara”, según precisa el documenta el oficio judicial del caso.
Los clientes de Fletcher Asset Management lograron congelar los $400.000 restantes, por una demanda civil que interpusieron en contra del abogado despedido. Pero su ingenio era tan fuerte, que logró con varios seudónimos, tarjetas de identificación y licencias de conducir falsas de diferentes estados que consiguió que el caso fuese desestimado por la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York, logrando entonces huir con el dinero al sur de la Florida.
Cuando se estableció en la ciudad de Miami, compró un apartamento de lujo en efectivo, por una suma de 775 mil dólares, un Maserati 2013 valorado en 900 mil y gastó el resto en viajes y apuestas.
Con las identidades falsas consiguió préstamos en varios estados pero al incumplir en los pagos, entró en mora. Pero a comienzos del año pasado huyó a Nueva York de nuevo y lo detuvieron en Ridgewood. Un jurado de Miami lo encontró culpable el viernes de 40 delitos que se le imputaron, como robo de identidad, fraude bancario y financiero.
Su caso judicial se extendió por tres semanas en un tribunal al sur de Florida, por lo pronto deberá esperar por conocer la sentencia que se le imputará el próximo 26 de septiembre.
Redacción Cubanos Por el Mundo / Con información de el Nuevo Herald
