Un caso de “violación venganza” tuvo lugar en una zona de rural de Pakistán llamada Multan, donde 28 hombres abusaron de una joven de 17 años luego de que el hermano de esta violara a una niña de 12 años de ese mismo poblado.
La policía de Pakistán informó sobre la detención de los 28 sujetos, todos pertenecientes al consejo tribal de ese poblado.
La madre de la víctima de 12 años, le dijo a la Policía que su hija estaba cortando hierba en un campo cuando fue violada por un hombre. La menor le dijo a su madre que había sido violada y denunciaron el hecho ante los ancianos del pueblo.
Después de deliberar, los ancianos declararon que una de las hermanas del atacante sería violada en represalia por el crimen, según el informe policial.
Shehbaz Sharif, jefe de Gobierno de la provincia del Punyab donde ocurrió la violación, catalogó este acto como una “desgracia para la humanidad” y afirmó que los culpables serán castigados.
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Sharif viajó esta mañana a Multan, donde se reunió con la familia de la niña de 17 años.
Los hechos ocurrieron a mediados de julio en las afueras de la ciudad oriental de Multan cuando un consejo tribal decidió que para castigar la violación de una niña de 12 años, los familiares de esta podrían abusar sexualmente de la hermana de uno de los violadores.
La denuncia de la “violación por venganza” fue presentada el 20 de julio, pero los agentes de la comisaría no tomaron medidas.
Los familiares de las dos jóvenes violadas presentaron entonces denuncias en el Centro de Violencia de la Mujer de la ciudad y desde el miércoles suman 28 personas detenidas.
“Si la denuncia se presentó el 20 de julio, por qué no fueron los acusados arrestados el mismo día”
Al mismo tiempo, el Tribunal Supremo decidió tomar el caso de oficio y pidió al inspector general del Punyab que le presente un informe, según dijo a la agencia de noticias EFE el portavoz del tribunal, Mohamed Ishtiaq.
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Los consejos tribales están formados por los ancianos de una localidad y actúan para solucionar disputas en zonas rurales del sur de Asia.
En esta zona del mundo son habituales la entrega de mujeres, a menudo niñas, o castigos contra ellas para solventar disputas familiares o como compensación por delitos cometidos por hombres, una práctica conocida como “vani”.
En uno de los casos más sonados, 13 menores de entre 4 y 16 años de edad de un mismo clan fueron entregadas para ser casadas con hombres de otra familia en el centro del país y así resolver una disputa entre dos tribus por un homicidio en 2012.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de Univisión
