Más de 1,5 millones de metros cúbicos de desechos sólidos en las calles de La Habana dejó el paso del huracán Irma por la isla. De este total, ya se han recogido al menos 137 mil metros cúbico entre árboles, cubiertas, escombros, postes y cables de electricidad y comunicaciones.
Segun reseña la agencia EFE, el saneamiento de la capital lo realizan 19.240 trabajadores de la empresa estatal de Servicios Comunales, en 731 camiones y 12 grúas, según una nota del diario oficial Juventud Rebelde sobre las labores de recuperación en la Isla, recibiendo el apoyo de las brigadas de las Fuerzas Armadas, la Marina, reclusos y trabajadores estatales voluntarios.
En las zonas más dañadas por el meteoro en la capital cubana, se encuentran las barriadas de Centro Habana, Habana Vieja, Vedado y Playa, donde el mar entró hasta 300 metros tierra adentro y los vientos huracanados causaron derrumbes totales y parciales de viviendas.
Se estima que más de 4400 hogares se vieron afectados hasta este miércoles, producto de otros 21 derrumbes totales —que se suman a los 157 ya reportados—, nueve parciales y 82 techos dañados.
Atención a damnificados
Autoridades cubanas han destinado varios locales para los damnificados, provenientes sobre todo de Centro Habana, que posee un gran número de casas antiguas y en mal estado. Informaron que se encuentran trabajando en la adaptación de la escuela Solidaridad Latinoamericana, en Arroyo Naranjo, para recibir a las familias afectadas de ese municipio, y el viernes concluirá la reforma de otro centro en La Lisa para acoger a más personas de esa localidad.
En Cuba, 10 personas perdieron la vida durante el ciclón producto de derrumbes de viviendas. El diario informó que este jueves comenzaría la evacuación de un edificio ubicado en el Malecón para su posterior demolición a causa del notorio mal estado del inmueble.
El poderoso huracán también causó graves afectaciones en el servicio eléctrico de La Habana y la zona centro-oriente del país, la más azotada por el fenómeno meteorológico, que tocó tierra en los cayos del norte cubano con categoría 5 en la escala Saffir-Simpson.
En toda la Isla el huracán derribó unos 2.400 postes de comunicaciones y otros miles que sostenían las líneas eléctricas, sobre las que cayeron numerosos árboles.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de EFE
