Los administradores de redes wifi en Cuba temen que el Régimen arremeta en su contra y aplique nuevas restricciones al espectro radioeléctrico. Los temores se originan por las declaraciones de Pablo Julio Pla Feria, director general de Comunicaciones del Ministerio de las Comunicaciones (Mincom), al medio estatal Juventud Rebelde a principio de este mes, informa el portal CubaNet.
“El espectro radioeléctrico, además de ser un recurso natural, es soberano. Está regulado por cada país, tomando como base las normas internacionales que se elaboran por la Unión Internacional de Telecomunicaciones, organismo del cual Cuba forma parte”, indicó Pla Feria.
Según explicó, cuando en una misma frecuencia del espectro aparece otro transmisor no autorizado se produce una interferencia que puede degradar el servicio o impedir que este sea brindado. Eso justificaría la necesidad de establecer regulaciones en el sistema radioeléctrico.
Cree que necesario “organizar” el crecimiento acelerado de las telecomunicaciones en Cuba, que como en el mundo, han aumentado los servicios que se valen del espectro radioeléctrico para su funcionamiento.
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Eduardo Gómez, administrador de Snet en la provincia Mayabeque, que los servicios que ofrecen requiere del pago de los usuarios, ante lo que podrían considerar hacer alguna contribución fiscal al estado, siempre y cuando sea módica y les permita operar tranquilos. Asegura que han tomado las previsiones para que las frecuencias oficiales no sean interferidas.
“Nosotros estamos de acuerdo con pagar un impuesto siempre y cuando se nos legalicen nuestras redes y nos dejen tranquilos, al final el estado nunca nos ha apoyado en nada, solo hemos recibido acoso y trabas. Nuestras redes wifi se encuentran operando en canales diferentes a las redes estatales para no ocasionar interferencias”.
Crecen redes de barrio
Las redes wifi “ilegales” en Cuba han crecido de forma considerable en los últimos años, aunque los equipos usados para las mismas como los AP (puntos de acceso) no se venden en tiendas estatales su importación está prohibida. Las redes de barrio se mantienen funcionales y sus administradores trabajan de manera unida para el correcto funcionamiento de las mismas.
Redacción Cubanos Por El Mundo