Estrés o “histeria colectiva” y no “ataques acústicos“. Un grupo experimentado de neurólogos consultados por el diario The Guardian, afirman que los síntomas que presentaron más de 20 diplomáticos estadounidenses se debe a que estaban en una ciudad agitada y estresante como La Habana y no por sofisticados aparatos sónicos.
Los profesionales expresaron que no es posible establecer un diagnóstico adecuado con la poca información que se tiene, además que tampoco se tiene acceso a ninguna de las 22 víctimas estadounidenses.
“No es posible un diagnóstico adecuado sin mucha más información y acceso a las 22 víctimas estadounidenses, que han sufrido una serie de síntomas que incluyen pérdida de audición, dolores de cabeza y mareos”.
Los expertos sospechan que los síntomas se deben a un trastorno psicosomático relacionado con el alto nivel de estrés en La Habana.
“Desde un punto de vista objetivo, es más como una histeria colectiva que cualquier otra cosa”, dijo Mark Hallett, director de la sección de control del sistema neuromotor del Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares de EEUU.
La “histeria colectiva” es el término popular para los brotes entre grupos de personas que son parcial o totalmente psicosomáticos, pero Hallett dice que no debería culparse a las víctimas.
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“La enfermedad psicosomática es una enfermedad como cualquier otra. No debería ser estigmatizada”, indica Hallett, quien también es presidente de la Federación Internacional de Neurofisiología Clínica. “Es importante señalar que los síntomas como estos no son voluntarios. No son un signo de debilidad en la personalidad de un individuo”.
Hallett considera que es más común que tales trastornos afecten a grupos más pequeños de personas, a menudo en familias, pero afirma que es factible que un mayor número de individuos se viera afectado, especialmente cuando trabajan estrechamente juntos en un ambiente tenso y hostil.
“Si se trata de una histeria colectiva esto aclararía todo el misterio -y probablemente se normalizarían las relaciones entre Estados Unidos y Cuba nuevamente”, dijo Hallett. “Estas personas están agrupadas en un ambiente algo ansioso y esa es exactamente la situación que precipita algo como esto. La ansiedad puede ser uno de los factores críticos”.
Sin respuestas
Por su parte el Departamento de Estado sigue sin respuestas. Sus funcionarios no saben que o quien causó estos ataques contra los diplomáticos de la embajada de EE.UU en La Habana, sin embargo las investigaciones siguen su curso.
“No tenemos respuestas definitivas sobre la causa o la fuente de los ataques contra diplomáticos estadounidenses en Cuba, y continúa una investigación agresiva. No queremos adelantarnos a esa investigación”.
Robert Bartholomew, un médico y sociólogo, autor de varios libros sobre brotes de histeria colectiva, dijo por su parte que “nada de esto tiene sentido hasta que se considere la explicación psicógena (engendrado u originado en la psique)”.
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“Las agencias de inteligencia estadounidenses son las más sofisticadas del mundo, y al parecer no tienen ni idea de qué está causando los síntomas. Apostaría mi casa a que hay agentes en la comunidad de inteligencia que también han llegado a la conclusión de que se trata de un evento psicógeno . La enfermedad psicógena masiva es, con mucho, la explicación más plausible”, agregó Bartholomew.
Redacción Cubanos por el Mundo