Así de claro: con un pasaporte cubano un ciudadano puede entrar a sesenta naciones del mundo, aunque a 32 de ellas se les exigirá Visa una vez cruzada sus fronteras. La cifra se vuelve roja si se compara con la cantidad de países a los que se abren las puertas si se tuviera, en cambio, un documento de esta naturaleza expedido desde Chile o Argentina, situadas en el cono sur de América.
El pasaporte caribeño se ubica en el ranking mundial de los 93 puestos elaborados por Passport Index, de acuerdo con lo reseñado en Diario de Cuba. Este ranking hace la lista a partir de la cantidad de países a los que los portadores pueden ir sin necesidad de contar con otros documentos adicionales, por ejemplo, la Visa.
Comparado con el pasaporte “más poderoso del mundo”, el de Singapur, con el que es posible visitar 159 naciones, el cubano solo funge como “tique de entrada” a Rusia, Bielorrusia, Botsuana, Gambia, Indonesia, Kirguistán, Micronesia, Mongolia, Namibia, Singapur, Trinidad y Tobago y los territorios palestinos.
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A la lista de los “más poderosos”, le siguen los documentos expedidos desde Alemania, Suecia y Corea del Sur. Otros que suman puntos negativos son los pasaportes de Haití, la mayoría de naciones africanas y algunos de Asia y Medio Oriente.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de Diario de Cuba.
