Un adolescente perdió la vida mientras dormía. Su hogar se desplomó, en la calle Neptuno 511, entre Perseverancia y Campanario, en Centro Habana. La parte interna del edificio se vino abajo y los escombros aplastaron al joven, el pasado jueves 26 de octubre, según reseña el portal Martí Noticias.
En el hecho varios de los vecinos y también residentes del complejo habitacional resultaron heridos, al ser golpeados por los escombros.
Las autoridades del Destacamento de Salvamento y Rescate explicaron que tuvieron que utilizar escaleras, y apoyarlas en el antiguo cine Neptuno para sacar a todos los habitantes del área.
El reportero independiente Mario Hechavarría se apersonó este lunes, en el lugar de los hechos y cuenta que la zona todavía se encontraba cerrada. El paso vehicular estaba clausurado y a los desalojados, según los vecinos los trasladaron hasta un albergue en Boyeros.
Trascendió que la Oficina Municipal de Arquitectura y Vivienda de Centro Habana había advertido hace tiempo atrás que este edificio estaba en “peligro de derrumbe”, pero aun así la gente seguía allí porque no tenían para dónde ir.
A la deriva
Decenas de personas perdieron las pocas pertenencias que el huracán Irma les dejó. Con tristeza una familia antes de ser llevada al albergue le reveló al reportero que “el Gobierno nunca se interesó en reparar e edificio, y ahora estamos en la calle. Lo perdimos todo. Y ahora hay que comenzar de nuevo”.
La falta de mantenimiento en las estructuras cubanas ha provocado que este tipo de situaciones y derrumbes se hayan convertido en algo común. La crisis es fuerte, las peticiones llegan al régimen, pero este al parecer se hace el sordo y nunca ayuda a quienes lo requieren y suplican a gritos.
Cuando ya no hay nada que hacer, los cubanos cuentan que allí los llevan a un albergue como en esta ocasión y les prometen una casa, promesa que según muchos es falsa.
En el mes de julio falleció otra persona, luego de que otro edificio se desmoronara, en el municipio habanero Playa. A mediados de junio, en La Habana se registró otro desplome. El pasado mes de abril se cayó la escalera de un edificio de diez pisos situado en la esquina de San Miguel y Amistad, en Centro Habana, dejando a todos sus habitantes atrapados dentro.
Y a pesar de estas situaciones, des estos desastres, de estas víctimas el régimen no suelta recursos para la restauración de estructuras que los cubanos no pueden mantener porque deben elegir si pintar una casa o comer.
Redacción Cubanos Por el Mundo