El opositor Freddy Guevara, primer vicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, desde el pasado viernes se encuentra en una lucha más fuerte con el régimen de Nicolás Maduro.
El Tribunal Supremo se ese país pidió levantarle la inmunidad parlamentaria y aseguró que el político debe ser juzgado por instigación pública y otros delitos. Desde ese entonces Guevara se refugió en la Embajada de Chile, quien lo ha acogido al temer por su integridad.
Tras estos hechos, este martes, el Parlamento venezolano, se alzó y declaró nulo el acto donde la fraudulenta Asamblea Nacional Constituyente (ANC) levantó la inmunidad de Guevara, y autorizó al Tribunal Supremo su detención, y enjuiciamiento.
La Cámara aseguró que al haber “pretendido” ejercer una función que no le compete, la Constituyente “incurrió en usurpación”.
Guevara, quien también es acusado de usar adolescente para delinquir, rechazó contundentemente estos señalamientos y aseguró no “ser un rehén más del régimen venezolano”.
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Las acusaciones contra el opositor fueron llevadas ante la plenipotenciaria Constituyente y este lunes esta Junta autorizó al máximo tribunal a abrir un juicio contra Freddy. Mientras que el Legislativo acordó este martes “desconocer” esta decisión dictada por la Sala Plena del TSJ “por ser abiertamente contraria a lo contemplado en la Constitución, en relación con la inmunidad parlamentaria, la noción de delitos flagrantes y el antejuicio de mérito”.
Guevara, por la situación en la que se encuentra no asistió este lunes a la cita de la Constituyente ni a la sesión de este martes del Parlamento. Actualmente está en la Embajada de Chile en Caracas, quienes lo protegen de “inminentes amenazas” a su seguridad e integridad personal.
Durante la sesión que realizó la Asamblea Nacional, la silla de Guevara fue forrada con una camisa negra en la que se leía “El que se cansa pierde”, una frase usada por los opositores que consideran que hay una lucha por la democracia en el país caribeño.
Para la diputada Delsa Solórzano esa silla vacía significa, a su vez, “una amenaza que se cierne sobre todo el cuerpo legislativo”.
Sobre esto, el parlamentario Henry Ramos Allup señaló que no se puede responsabilizar al convocante de una manifestación por algún exceso que cometa uno de los manifestantes.
“¡Si es que la responsabilidad penal es personalísima e intransferible! Si algún manifestante incurre en un exceso, usted como autoridad, como fuerza pública está obligado a aprehender y a someter a la administración de justicia a quien cometa el exceso. Usted no puede responsabilizar al convocante”, acotó.
En ese sentido, Ramos Allup afirmó que con el juicio a Guevara el régimen de Nicolás Maduro busca “inhibir” el derecho a la protesta en el futuro. “Ese es el objetivo”, apuntó.