Una sanción sostenida. Karina Gálvez, economista, no podrá trabajar como cuentapropista durante los tres años que cumplirá con privación de libertad bajo el delito de evasión fiscal, tras una condena recibida el pasado mes de septiembre por un tribunal municipal de Pinar del Río, reseña Martí Noticias.
Según comentó Gálvez, quien pertenece al independiente Centro de Estudios Convivencia, cumplirá la sanción fuera de una penitenciaría, sin embargo, no podrá ejercer su profesión en el sector privado por lo que tendrá que trabajar en el sector estatal. Además le prohíben la emisión de su pasaporte y la salida de Cuba hasta no culminar la sentencia.
La jueza que lleva su caso, le notificó este martes la sentencia, además de informarle que necesitará una autorización para salir del municipio y que tendrá que estar vinculada a un centro laboral del Estado.
A pesar de su formación profesional, la economista no podrá trabajar en la docencia, finanzas, ni en un departamento de personal, económico o con acceso a recursos, por lo que le ofrecieron trabajo como auxiliar de limpieza en el Hospital Clínico Quirúrgico Provincial Abel Santamaría.
“Mi preocupación ahora es que para optar por un trabajo con el Estado exigen ciertas condiciones políticas, y precisamente por eso es que estoy sancionada”, dijo Gálvez.
Durante el proceso legal y la sentencia de privación de libertad por el supuesto delito de evasión fiscal en la compraventa de una casa, el inmueble fue confiscado y quedó a disposición de la Dirección Municipal de Vivienda, subordinada al Consejo de la Administración del Municipio de Pinar del Río, indica el portal.
Desde la casa de Gálvez sesionaba el Consejo de Dirección del independiente Centro de Estudios Convivencia, que antes había sido objeto de acoso y represalias políticas por parte de la Seguridad del Estado en Pinar del Río.
Enfrentarse a las arbitrariedades del régimen, es ya una situación reincidente para la economista. Para el año 2009, el patio de la casa de los padres de Gálvez, donde el grupo Conviviencia se reunía a realizar tertulias, debates y encuentros de índole sociocultural, también fue confiscado y clausurado por las autoridades locales.
En ocasiones anteriores, la organización ha denunciado persecución por razones políticas en contra de la economista y otros de sus integrantes.
Redacción Cubanos por el Mundo