Sin contemplaciones. Así actuó el grupo yihadista Estado Islámico contra 15 de sus miembros, al decapitarlos tras sostener una discusión interna en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, reseñó EFE.
Attaullah Khogyanai, gobernador de la provincia, reveló a la agencia de noticias que las ejecuciones las realizaron ayer en la tarde, en el distrito de Achin, considerado el bastión de la formación en el país y donde hace algunos meses surgieron una serie de disputas entre facciones que todavía continuaban.
“Algunos de ellos ya han comenzado a matarse unos a otros”, añadió otra fuente oficial.
DE SU INTERÉS: Trump amenaza al Estado Islámico: “pagarán caro cada atentado en EE.UU.”
Dawlat Waziri, portavoz del Ministerio de Defensa afgano, confirmó estas decapitaciones y achacó los problemas internos de la formación a la creciente presión interpuesta por las fuerzas de seguridad con sus operaciones en la zona.
“No tienen bases permanentes en las aldeas y han huido a las montañas vecinas, desde donde lanzan a veces sus ataques de guerrillas y vuelven a huir”, explicó Waziri, quien detalló que el número de yihadistas actualmente se ha reducido en Nangarhar, donde ahora existen medio millar con los continuos ataques aéreos y terrestres de las tropas afganas e internacionales.
RECOMENDADO: Ex-primera dama de ISIS: “Nuestros sueños eran criar a nuestros hijos para el terrorismo”
El Estado Islámico irrumpió en Afganistán en 2015 en diferentes puntos del país y creó su principal bastión en Nangarhar, fronteriza con Pakistán y clave en las comunicaciones entre los dos países.
Desde entonces y, aunque las autoridades han afirmado en diversas ocasiones que han reducido su presencia a unas pocas zonas remotas, la formación yihadista ha reclamado algunos de los atentados más sangrientos en el país.
LEA TAMBIÉN: Estado Islámico acabó con al manos 116 sirios tras su retirada de Qariatain
Redacción Cubanos Por el Mundo
2 Comments
Leave a Reply