Las arbitrariedades se hacen presentes en cada acción del régimen castrista. De acuerdo con Martí Noticias, el joven Noel Martínez de 17 años, fue condenado a cinco años de cárcel luego de que defendiera a su perro de recibir un disparo por parte de funcionarios de la Seguridad del Estado que allanaban su casa sin motivo alguno.
De acuerdo con el padre del acusado, Raúl Martínez, los agentes llegaron el pasado 1 de octubre a su casa en Guantánamo para allanarla sin tener una orden de registro.
“Mi esposa no los dejó entrar, les dijo que yo no me encontraba en la vivienda, que ellos no podían entrar así como ellos querían”, explicó Caraballo quien es coordinador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU)
El hombre informó que aunque los oficiales de la seguridad y la policía buscaron apoyo en el barrio para efectuar el registro “las personas no quisieron prestarse para eso”.
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El incidente tomó calor cuando uno de los funcionarios amenazó con matar al perro del joven con un disparo y este protestó de manera airada.
“Llamaron a la policía de “Manuel Tames” completa y el cuerpo del Ministerio del Interior y 12 agentes de la Seguridad del Estado”, señaló el disidente.
Caraballo explicó que junto a su hijo los condujeron hasta la unidad policial del municipio. A él lo trasladaron a Operaciones en Guantánamo por cuatro días y al liberarlos, su hijo quedó sujeto a juicio.
El viernes 24 de noviembre el joven fue sancionado por el tribunal municipal y Caraballo relató que al abogado defensor increpó duramente a los jueces.
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“El abogado les dijo a ellos que para entrar a hacer un registro, la orden tiene que estar firmada por Fiscalía; la conducta que le pusieron a mi hijo fue de contrarrevolucionario y antisocial. El jefe de sector no se presentó y el abogado les dijo: ‘Ustedes están acusando a este niño de todas esas conductas negativas en el barrio cuando no ha sido ni multado por el jefe de sector”.
En una ocasión anterior hace seis años, contó Martínez Caraballo, él fue detenido y su hijo menor de edad fue llevado ante una fiscal.
“Cuando tenía 11 años me lo llevaron para un tribunal, lo citaron conmigo y su mamá y lo interrogó la fiscal del municipio (preguntándole) que si él había puesto carteles, lo han estado acusando desde los 11 años de edad”.
Redacción Cubanos por el Mundo