Otro aliado del castrismo se ve acorralado. Ahora le llegó el turno a la expresidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner, quien es investigada por la muerte del fiscal Alberto Nisman, luego de que este descubriera la complicidad de su administración en el atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina.
En el documento de 600 páginas que será publicado en el Centro de Información Judicia, el juez federal Claudio Bonadio ordenó la detención del exsecretario de Legal y Técnica Carlos Zannini, quien fue arrestado en la madrugada del jueves en Río Gallegos, provincia de Santa Cruz; del piquetero Luis D’Elía, el lobbista y militante islámico Jorge Alejandro “Yussuf” Khalil y del exlíder de Quebracho Fernando Esteche, informa EFE
Bonadio comenzó una ronda de indagatorias el 17 de octubre, fecha en la que declaró el excanciller Héctor Timerman, y terminó el 26 de ese mes con la declaración de la exmandataria. En el medio, fueron indagados también el espía Ramón Allan Bogado, el exsecretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, y otros exfuncionarios kirchneristas.
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Según el fiscal de la causa, Gerardo Pollicita, existió un plan criminal destinado a dar ayuda que permitiera dotar de impunidad a los acusados de nacionalidad iraní por el atentado a la sede de la AMIA. Acciones que consideró en contra de los intereses de las víctimas y el esclarecimiento del ataque terrorista.
Este proyecto, denunciado por el fallecido fiscal Nisman, habría sido orquestado y puesto en funcionamiento por las altas autoridades del anterior Gobierno, recuerda Infobae.
El medio elegido para concretar el plan fue el Memorando de Entendimiento con Irán que se firmó el 27 de enero de 2013 en Etiopía.
El acuerdo iba a permitir remover, suspender o moderar las restricciones a la libertad que afectaban a los acusados. También disponía la creación de la Comisión de la Verdad cuyo rol central iba a ser en realidad exculpar a los imputados iraníes introduciendo una nueva hipótesis acerca de cómo fue el atentado.
Nisman murió apenas unos días después de presentar su denuncia. Su cadáver fue encontrado en su apartamento de Buenos Aires con un disparo en la cabeza. Aunque en un principio se habló de suicidio, los investigadores están ahora convencidos de que fue un homicidio.
Redacción Cubanos por el Mundo
