Como si el régimen tuviera todos los problemas del pueblo cubano controlados, se dispone en 2018 a abrir dos estaciones astronómicas con el fin de monitorear la basura cósmica y meteoritos.
Este es un nuevo anuncio de la revolución que no soluciona el hambre de los cubanos y para colmo Moscú está involucrado.
Y es que tanto La Habana como Moscú realizarían la explotación cooperada de las dos estaciones astronómicas, según dio a conocer la oficial Agencia Cubana de Noticias, con información suministrada en un seminario en el Planetario Rosa Elena Simeón, de la Oficina del Historiador de la Ciudad, en La Habana, donde participaron expertos de los institutos de Geofísica y Astronomía (IGA) de Cuba y el de Astronomía de la Academia de Ciencias de Rusia (INASAN).
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Martha Rodríguez Urapsuka, directora del IGA, explicó que en el encuentro se discutió la posibilidad de realizar un proyecto internacional en conjunto para la construcción del observatorio dentro de Cuba.
Rodríguez Urapsuka explicó que previo al seminario, profesionales de ambas entidades desarrollaron mediciones astro climáticas y meteorológicas en el Cuba, con el propósito de montar un equipo de última generación.
Se prevé que luego de aprobado el proyecto, se concluya en cinco años con posibilidad de extenderse.
El proyecto “permitirá el montaje en el país de dos telescopios modernos totalmente automatizados para la realización de observaciones posicionales, fotométricas y espectroscópicas de una amplia clase de objetos astronómicos desde el territorio nacional”, añadió Rodríguez Urapsuka.
Complicidad
En los últimos años Moscú y La Habana han dado pasos para recuperar la estrecha cooperación que mantenían antes de la desintegración de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), en 1991.
Redacción Cubanos por el Mundo
