Como si fuera abril de 2017, Venezuela vuelve a «incendiarse». Los pequeños focos de protestas comienzan a multiplicarse en los 23 estados bolivarianos. Desde el viernes, se registran «violentos incidentes» en Caicara del Orinoco, estado de Bolívar, al sur de la nación, y han causado, al menos, una veintena de comercios saqueados y varios heridos.
A estas acciones de calle, la preceden otras en la capital venezolana y otras ciudades por falta de alimentos, agua y gas, reporta la AP.
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Jesús Rodríguez, un comerciante de licores de esa zona, relató:
“En Caicara del Orinoco los disturbios se desencadenaron cuando centenares de personas, irritadas por la falta de alimentos, medicinas y dinero en efectivo, atacaron comercios del centro de la localidad y derribaron puertas y paredes para llevarse todos los productos que había en los locales”
Fueron, “prácticamente”, en todo el pueblo, destacó Rodríguez. Los ataques a los comercios se “extendieron por toda esa población agrícola y ganadera, de unos 150.000 habitantes”.
“El pueblo anda como loco, el hambre los está matando“, agregó.
En Los Guaritos, Maturin, Monagas, el desespero y la angustia de la gente acabó con lo que quedaba del negocio Sandra, un comercio chino tradicional del sector. Mutismo y culillo del Gobierno Civil Regional que luego de 5 días de protestas está ausente.
— Maria G Hernández Del Castillo (@MariaGMonagas) January 6, 2018
Carlos Rodríguez, dirigente opositor y habitante de Bolívar, dijo saquearon a “más de una veintena de comercios de alimentos, ropa y licores“. En la algarabía, se lesionaron varias personas.
Agentes de la policía y funcionarios militares patrullaron las calles “para tratar de proteger los comercios” restantes. Aeronaves del Ejército sobrevolaron la localidad.
Al otro lado del mapa
Al occidente del país, también hubo protestas. Y la Corporación PDVAL en Los Puertos de Altagracia, Miranda, estado de Zulia, fue el escenario.
Allí, se mantenían “almacenados lotes de alimentos y juguetes que presuntamente no fueron distribuidos en diciembre“. Los habitantes de la localidad “se concentraron en las afueras del establecimiento, mientras efectivos policiales y militares lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar la manifestación”.
“En Caracas y ciudades del interior también se han producido protestas por la escasez de alimentos, gas y gasolina. Una joven embarazada murió a finales del mes pasado por un disparo en medio de un tumulto en una barriada del oeste de la capital, donde esperaba el pernil de cerdo prometido por Nicolás Maduro”
Redacción Cubanos por el Mundo.
