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Crónica del Día de Reyes en Cuba: ¿habrá obsequios?

Muchos pequeños en Cuba «fabrican» su diversión / Foto: captura de YouTube.

Los jóvenes de hoy que crecieron en la Cuba de los noventa solo «jugaban con su imaginación». Sin «reyes» ni juguetes crecieron. Eran tiempos tan duros en la isla, reporta Martí Noticias, que las oportunidades de adquirir «carritos» o muñecas una vez al año por medio de la «libreta» ya era difícil. 

Una muñeca de las más sencillas cuesta 50 CUC en Cuba. A ese precio, ¿quién puede pagarla?

Ismael Hernández recuerda los «días de reyes» en la isla con la más absoluta de las precariedades:

“Yo tuve los juguetes que heredé de mis hermanos mayores, imagínate que nací en el 91, no había nada, jugábamos con nuestra imaginación y con tarecos, nunca oí hablar de reyes

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En el 2000, como relata el diario, “los padres intentan recuperar la tradición de 6 de enero, que habían heredado de la costumbre cristiana e hispana de regalar a los niños como colofón de la Navidad”, sin embargo, los juguetes fueron un objeto de lujo. Incluso, hasta los más simple y comunes.

 

Recorridos infructuosos

Rostros preocupados abundan en las jugueteras de La Habana en la víspera del día. El precio medio de un juguete ronda los 15 cuc, de acuerdo con la publicación. Ese es “todo el salario de muchos en Cuba”.

Abel García, profesional, lleva meses ahorrando para los gastos de fin de año. Ha gastado más de 100 cuc, y solo gana 20 al mes. 

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Entretanto, padres y abuelos, intentan recuperar la fantasía y conservar la inocencia de los pequeños. Los recrean con lo que tienen a la mano para no olvidar la fecha que tanto anhelan desde su infancia.

Ana María Herrero da testimonio.

“Para mí era el mejor día del año (…) Me acostaba temprano, escribía la carta y dejaba hierba y agua para los camellos, y al despertar tenía mi regalo. Y es lo que quiero para mis nietos, que vivan con esa ilusión, esa fantasía, pero es muy difícil

La publicación de Martí Noticias cierra con una reflexión: “Ojalá que la realidad no llegué nunca a matar la inocencia y la ilusión de los niños cubanos”.

“A la pregunta de aquella canción de «¿dónde jugarán los niños?», hay que añadir «¿con qué?». Pero habrá que desearles Feliz Día de Reyes, a pesar de todo”

Redacción Cubanos por el Mundo.

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