El gobierno de Nicolás Maduro anunciará, próximamente, los mecanismos de restablecimiento de las vías aéreas y marítimas hacia las islas caribeñas de Aruba, Curazao y Bonaire.
Estas comunicaciones fueron cerradas por 72 horas para “combatir presuntas mafias de contrabando de bienes básicos y recursos mineros como el oro”.
Reporta la AFP que el cierre temporal de las comunicaciones por aire y mar responde a la necesidad de “restablecer una reestucturación y una defensa de los intereses económicos de Venezuela”, según lo declarado por Maduro durante un Consejo de Ministros transmitido por la televisora estatal VTV.
RECOMENDADO: Perniles: la nueva amenaza del régimen de Nicolás Maduro
“No quería tomar una medida como ésta, pero estoy dispuesto, inclusive, a tomar una medida más radical“
Exigió además a los gobiernos de las tres islas caribeñas “un acuerdo para el control del contrabando y el establecimiento de un comercio sano.
Esta decisión deviene desde 20 de diciembre, cuando Nicolás Maduro amenazó con cerrar “toda vía de comunicación y comercialización por las mafias que se llevan todo”.
¿De quién es la culpa?
La responsabilidad es de todos menos del gobierno. Eso lo han declarado diversos funcionarios. Y mientras se atribuyen culpabilidades, la escasez de alimentos y medicinas, la espiral hiperinflacionaria, la especulación con los precios por parte de empresarios y comerciantes y al contrabando de productos subsidiados hacia el Caribe y las ciudades fronterizas colombianas de Maicao y Cúcuta, entristecen la vida del venezolano.
“Venezuela, dependiente de las importaciones, ha reducido drásticamente sus compras externas ante la caída de los ingresos petroleros, que aportan 96% de sus divisas”
Entretanto, Nicolás Maduro aseguró a medios locales que los “turistas y pasajeros tendrán garantizado su transporte para retornar a sus países“. Sin embargo, no aportó detalles.
Redacción Cubanos por Mundo.