La familia del opositor cubano Eduardo Cardet, coordinador nacional del Movimiento Cristiano Liberación, denunció recientemente las agresiones recibidas por el preso político durante un traslado de penal.
Lo que no se imaginaron fue que las agresiones hubieran sido tan graves. Quizá por eso les negaron las visitas las semanas siguientes del 19 de diciembre de 2017, cuando fue trasladado de la prisión provisional de Holguín hacia un penal de mayor seguridad conocido como Cubasí.
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Yaimaris Vecino, esposa de Cardet, informó que el médico opositor recibió varios golpes en la cabeza y tiene secuelas de “dos heridas punzantes en el abdomen, de las cuales no se tenía conocimiento”, según reseña de Martí Noticias.
“Muy preocupada. Fui a visitar a Eduardo el lunes. Nada favorable. Lo que le pasó a él allí fue más grave de lo que pensábamos. Recibió varios golpes en la cabeza, de los cuales todavía tiene mareos y no se siente bien y tiene dos heridas punzantes en el abdomen, de las cuales no teníamos conocimiento”, señaló Vecino.
Aunque las heridas no afectaron ningún órgano vital, fueron de gravedad puesto que luego de un mes de haberlas recibido aún mantiene las marcas de las “dos punturas que recibió”.
“Estamos preocupadísimos. Él está en la misma compañía de los presos que lo agredieron. Son tres prisioneros quienes le propinaron los golpes”, denunció Vecino.
Contexto
Como en comunismo no hay leyes que amparen a quienes piensan distinto, a Cardet lo arrestaron y lo montaron a golpes en una patrulla que esperaba frente a su residencia en Velasco, Holguín, el pasado 30 de noviembre de 2017, días después del fallecimiento del dictador Fidel Castro.
En tiempo récord fue enjuiciado y condenado a tres años de prisión por el supuesto delito de atentado a un oficial durante su arresto.
Redacción Cubanos por el Mundo
