“Nadie dispara, nadie dispara se está negociando”. Esas palabras pueden escucharse en un audio divulgado por Univisión el cuál rebela que el policía sublevado Óscar Pérez y su grupo pudieron haber sido capturados con vida, concretándose su rendición. Sin embargo, Pérez y sus compañeros aparecieron muertos, todos con tiros de gracia.
“Nadie dispara que estamos en el momento más difícil porque tienen una granada y estamos aquí adentro de la casa. Estamos frente a frente, aquí nos podemos morir todos”, dice el comandante de la operación quien es identificado por la cadena como el mayor de la Guardia Nacional Rafael Bastardo.
El operativo para lograr su captura comenzó entre las 4:00 y las 4:30 de la madrugada del día 15 de enero.
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Univisión afirma que el audio fue filtrado por fuentes policiales ligadas a la operación y fue grabado entre las 11:15am y 11:32 am, tiempo en que Pérez dejó de actualizar en redes sociales, única vía por la que el país entero se enteró de la masacre.
“Hay una negociación con Alfa 6 (mayor Bastardo), hay una negociación con Alfa 6, nadie dispara. Alfa 6, se están entregando a Alfa 6”. “El ciudadano Alfa 6 mantiene negociación con los cinco-ocho (sospechosos). Nadie dispara, nadie dispara”. “Ya tomada, ya tomada la vivienda. Ya tomada la vivienda por los compañeros. Transmitiendo todo a la superioridad que es lo que hay en la vivienda”.
Al principio del audio se escucha que los uniformados piden varias ambulancia, suponemos que es para auxiliar a los oficiales que presuntamente resultaron heridos durante el enfrentamiento.
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También un comando que se encontraba “arriba” afirma que uno de los hombres de Pérez que se encontraba en la parte de alta de la casa había soltado el fusil, desconocemos si fue por un disparo o voluntariamente.
Casi tres horas después de las conversaciones reflejadas en la grabación, todos los rebeldes estaban muertos.
Óscar Pérez, inspector de policía y piloto; José Alejandro Díaz Pimentel, exfuncionario de la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim); Abraham Israel Agostini, comerciante y exfuncionario de la policía del estado Aragua; Abraham Lugo, exfuncionario de la Guardia Nacional; Jairo Lugo, exfuncionario de la Guardia Nacional y hermano de Abraham; Lisbeth Ramírez, esposa de Jairo Lugo; y Daniel Soto, estudiante de periodismo.
El oficial sublevado había anunciado en sus redes que estaban intentando negociar su rendición, pero luego informó que los funcionarios querían asesinarlo. Esa imagen quedó grabada en la memoria de todos los venezolanos, ya que se observó a un Óscar Pérez temeroso y ensangrentado.
Durante los últimos segundos de la grabación, una voz ordena que abran el paso a los forenses hacia la zona donde se encuentra la casa.
“García, baja ahí en una moto e indica ahí en la parte baja que dejen pasar al Director Nacional de Medicatura Forense (Senamecf)”, dice. A esa hora, sin embargo, todos los heridos que se habían reportado ya estaban siendo atendidos en el hospital.
Redacción Cubanos por el Mundo
