Luego de 13 días en huelga de hambre y tras su recuperación, finalmente la activista Arianna López Roque pudo visitar a su esposo preso, el opositor Mitzael Díaz Paseiro quien recibe una constante amenaza y cumple una condena de tres años y medio de prisión, por el delito de “peligrosidad social” por oponerse a las votaciones en octubre de 2017.
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López Roque, integrante del Frente Nacional de Resistencia Cívica Orlando Zapata Tamayo al igual que su esposo, denunció que “fue golpeado en la prisión del Pre Presado en la provincia de Villa Clara y amenazado de muerte”, según reseña Diario de Cuba.
“Recibió una brutal y cruel paliza en los días que se encontraba en huelga de hambre. Lo golpearon mientras estaba esposado. Todavía se le mantiene las marcas y los fuertes morados”, denunció López Roque.
El matrimonio estuvo en huelga de hambre durante dos semanas en enero: López Roque en el portal de su casa y Díaz Paseiro en la prisión. Ambos suspendieron la huelga al conseguir los reclamos.
Exigencia
Los esposos reclamaban que le dieran al recluso derecho a las llamadas telefónicas y visitas familiares, así como derecho a la atención médica.
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López Roque, informó que Mitzael Díaz, durante su huelga de hambre fue “amenazado por oficiales de Seguridad del Estado cubano específicamente por parte del violento y cruel Eric Aquino Yera quien quería dejarlo morir”.
“Le negaron totalmente la atención medica, por eso me lo tenían desaparecido, que no me lo permitían ver, que no querían contacto con familiar alguno debido a esta fuerte golpiza”, denunció López Roque.
Asimismo explicó que su esposo “recibió serias amenazas de muerte. Le dijeron que él podía amanecer muerto un día en la celda, que ellos conocían de su problema del corazón. Le dijeron que al final había muchos otros muertos como el estudiante, como Boitel, como Zapata y que no había pasado nada y que él podía sumarse a esta lista. Lo trataron de aterrorizar con que su mamá estaba muy enferma. Así sigue sufriendo disímiles maltratos y privaciones”.
Amenazas
La activista señaló que el régimen les comunica abiertamente a los presos que el que ayude a Mitzael le será negado su derecho a llamadas telefónicas.
“Él se mantiene en su posición y no la piensa cambiar y con un estado de ánimo muy fuerte… él es el que nos da fuerzas”, concluyó López Roque.
Redacción Cubanos por el Mundo