Carlos Fernández de Cossio, diplomático del régimen castrista, asumió el cargo de director general para Estados Unidos en el Ministerio de Exteriores de la isla (MINREX), convirtiéndose en el sustituto de Josefina Vidal, un de los rostros más visible durante el restablecimiento de relaciones entre los antiguos enemigos de la Guerra Fría.
Durante la década de 1990, Fernández de Cossío estuvo a cargo de los asuntos relacionados con Estados Unidos, tiempos donde la isla afrontaba una dura crisis económica y política, además de la distante relación con su “enemigo” norteamericano.
El diplomático vuelve a su cargo en un momento donde se reaviva la tensión entre ambas naciones, producto del cambio en la política hacia Cuba de la administración de Donald Trump, quien se ha mostrado como un férreo crítico contra el régimen castrista que no ha mostrado cambios reales hacia los derechos civiles de la población. Aunado a esto, se suman los ataques a más de una veintena de diplomáticos estadounidenses en La Habana, cuya responsabilidad aún no ha sido determinada.
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En julio de 2017, Josefina Vidal había sido nombrada embajadora en Canadá, sin embargo continuaba al frente de las negociaciones con Estados Unidos como portavoz oficial del régimen de Castro luego de los ataques que complicaron la salud de 24 diplomáticos estadounidenses y sus familiares en La Habana.
Según Johana Tablada, subdirectora para Estados Unidos de la cancillería, Fernández de Cossío, es uno “de los más completos diplomáticos cubanos”. El diplomático también se desempeñó como embajador cubano en Canadá, en la subdirección Multilateral de la Cancillería y estuvo también a cargo de misiones en Asia y América Latina.
Redacción Cubanos por el Mundo