A más controles mayor escasez, esa es un principio que casi 60 años de socialismo le ha enseñado al pueblo cubano. Y es que el Ministerio de Salud Pública de Cuba puso en circulación un nuevo modelo de receta médica para tratar de “evitar” la venta y distribución de medicamentos subsidiados que son imposibles de conseguir en las farmacias cubanas.
Según informa la agencia EFE, las nuevas recetas comenzaron a circular a partir de 1 de febrero en La Habana e incluyen datos del paciente y rastrero hasta la institución de origen.
Además se le agrega un sello exclusivo, ubicado en la parte superior derecha que identifica el origen de las prescripciones.
Estos cuños tienen cuatro diseños: triangular para las instituciones de nivel nacional, circular en el caso de los hospitales, rectangular para policlínicos y en forma de polígono para otros centros de salud.
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Además, se agregaron casillas para especificar el nombre del medicamento y el número de identificación del paciente, junto a la ya requerida dirección particular si la medicina recetada tiene efectos similares a las drogas.
En el caso de la capital, también se especifica el nombre de la provincia en la parte inferior del documento, junto a un tomo y un folio, medida que debe evitar la circulación de recetas de La Habana hacia otros territorios y viceversa.
Esto para que los cubanos no puedan ir a otras ciudades a comprar el medicamento, ya que para el Granma, algunos las revenden en el mercado negro.
“Los nuevos diseños llegarán al resto del país a partir del próximo 19 de febrero, como parte del trabajo del MINSAP para enfrentar los delitos e ilegalidades con el uso indebido de los medicamentos, las recetas médicas y los cuños institucionales”
Los medicamentos más vulnerables a la sustracción son las tabletas, los analgésicos y antipiréticos, y precisamente los que más escasean en los anaqueles de las farmacias, todas estatales.
Déficit
En Cuba faltan hoy 49 medicamentos, de ellos 44 de producción nacional y cinco importados.
La empresa estatal BioCuFarma produce 505 (63 %) de los 801 fármacos consumidos en el país, para lo que importa más del 85% de la materia prima, en su gran mayoría comprada en mercados lejanos como China, India, y Europa.
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A finales del pasado año, el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) y BioCubaFarma reconocieron desde junio de 2017 se estaban registrando “grandes afectaciones” en el abastecimiento y producción de medicamentos en la Isla por el impago a los proveedores.
Redacción Cubanos por el Mundo
