Los pasajeros y la tripulación del vuelo 6902 de la empresa Low Cost Transavia vivió lo impensado cuando uno de los viajeros los obligó a soportar el hedor de sus abundantes flatulencias. Pese a la petición de un amigo y de otros pasajeros para que se detuviera, no lo hizo. El desagradable hecho terminó en una pelea que encendió las alertas de los pilotos, quienes decidieron aterrizar de emergencia para evitar un mal mayor.
El vuelo comprendía la ruta desde la ciudad de Dubai hacia a Amsterdam, pero ante la imprevista emergencia, producto del enfrentamiento de los pasajeros, el piloto se vio obligado a realizar una parada en Viena. Según informó el diario De De Telegraaf.
Passagiers die er door de Polizei uit zijn gehaald. 4tal uitte bedreigingen naar medepassagiers en crew. #hv6902 2/2 pic.twitter.com/fqLBOqeZwN
— Alfred Dekker (@pr8sport) February 12, 2018
Todo inició con los fuertes olores nauseabundos, que despertaron la curiosidad de más de uno en el avión. Un par de amigos holandeses fueron los primeros en notarlo, quienes unos minutos después pudieron ubicar el origen de los sonidos, provenientes de otro viajero, que parecía muy tranquilo ante lo que hacía.
Una tras otra, las flatulencias lograron enfadar a los holandeses, al igual que al resto de los pasajeros. Los hombres no aguantaron más y se acercaron al pasajero responsable de los gases para pedirle que se detuviera, a lo que hizo caso omiso. Fue así como la pelea inició y la situación se tornó muy agresiva.
Detenidos
El conflicto se volvió tan serio que el piloto, las azafatas y uno de los comisarios a bordo intentaron intervenir para detener a ambos pero no cesaron. El comandante de vuelo tuvo que desviar la ruta original hacia Viena debido al altercado.
La policía subió a bordo del avión con perros e hizo descender a dos hombres y dos hermanas mujeres. Unas horas después, cuando el avión ya había continuado su vuelo rumbo a Amsterdam, todos fueron liberados dado que no habían violado las leyes austríacas.
Redacción Cubanos Por El Mundo