Al menos 565 personas fueron descubiertas trabajando en condiciones similares a la esclavitud en un operativo del Ministerio del Trabajo, en Brasil. Los trabajadores estaban bajo la influencia de una secta religiosa brasileña denominada “Comunidad Evangélica Jesús, la Verdad que Marca”, informaron las autoridades mediante comunicado, según EFE.
“Ellos creen que en estas haciendas están protegidos del fin del mundo, lo que hace más difícil la situación en que están. Además de que les niegan los derechos laborales, son engañados. No quieren salir. Dicen que es una maravilla y el sueño de sus vidas”, señaló el fiscal Marcelo Campos, a cargo de la operación.
Una operación de fiscalización del Ministerio de Trabajo de Brasil permitió hallar hoy a 565 personas que eran sometidas a condiciones análogas a la esclavitud en haciendas de propiedad de una secta religiosa brasileña, informaron fuentes oficiales. pic.twitter.com/RgRbpr6Vu0
— Qué Poca Madre 🇲🇽 (@QuePocaMadre_Mx) March 16, 2018
Las investigaciones emprendidas desde el 2013 permitieron hallar a 32 menores de edad ejerciendo actividades prohibidas, y al menos 438 obreros que no contaban con las condiciones mínimas de trabajo y contrato formal. Las irregularidades lideradas por el grupo religioso fueron constatadas en 15 diferentes municipios de los estados de Sao Paulo, Minas Gerais y Bahía.
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Desde hace varios años las autoridades habían hecho operativos similares tras corroborar que habían cientos de personas sometidas a extendidos horarios de trabajo, en condiciones infrahumanas y en muchos de los casos sin paga, explotados a cambio de techo y comida.
El personal fue reclutado en Sao Paulo por los líderes de la secta, tras convercelo de donar sus bienes a las asociaciones controladas por el grupo religioso y de convivir junto al resto de los obreros en campos rurales, en un ambiente comunal.
Diversidad de trabajos
Los explotados eran sometidos a todo tipo de oficio en completa sumisión debido al adoctrinamiento que recibieron. Muchos de ellos se dedicaban a cultivos agrícolas, así como a labores en talleres mecánicos, puestos de gasolina, pastelerías, restaurantes y talleres de confecciones, todos pertenecientes a la red de empresas a nombre del grupo religioso.
“Por lo general, en todas las operaciones de combate al trabajo esclavo, las víctimas, cuando llegan los fiscales y los policías, dicen que quieren ser liberados. Pero este caso no es normal, porque las personas fueron adoctrinadas y nos recibieron como si fuésemos el demonio”, declaró el fiscal a cargo.
De acuerdo al comunicado del Ministerio de Trabajo, durante la investigación llamó la atención el crecimiento patrimonial de los líderes de la secta y el gran aumento del número de fieles en los últimos cinco años.
Redacción Cubanos Por El Mundo
