Eliécer Llorente, hijo de Daniel Llorente Miranda, detenido desde mayo del 2007 por enarbolar la bandera estadounidense en un acto oficial, hizo una nueva denuncia sobre las arbitrariedades del régimen en contra de su padre, a quien mantienen en un fuerte aislamiento, recluido en el hospital Psiquiátrico de La Habana, según informó Cubanet.
“Todo hombre de justicia pelea por la libertad donde la vea ofendida, porque eso es pelear por su entereza de hombre, y el que ve la libertad ofendida y no pelea por ella, o ayuda a los que la ofenden, o no es un hombre entero”, dice una frase firmada por José Martí, que Daniel Llorente colgó sobre su pecho durante un día de visita el pasado 14 de febrero, lo que le costó nuevas represalias.
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“Desde esa fecha, no me habían dejado visitarlo más y la semana pasada fue que me permitieron verlo. Desde ese día a los pacientes los amenazaron con aplicarles medidas disciplinarias si mantenían alguna comunicación con él y a los trabajadores de la sala Giral los cambiaron por no impedir lo que hizo mi papá”, denunció el joven.
Más amenazas
A principios del mes de febrero, Eliécer fue amenazado por las autoridades con ser enjuiciado sí insistía en acciones como llevarle a su padre en secreto el chip de su teléfono móvil, para que pudiera comunicarse con la familia.
La represalia oficial fue la de prohibirle las visitas durante un mes. Ahora le permitieron verlo bajo estricta supervisión, no hay un momento para estar a solas con su padre.
“Todavía, en la actualidad, no lo dejan llamar por teléfono como a los otros pacientes, a pesar de que es un derecho que tiene. Apenas lo sacan a coger sol y la dirección del hospital mantiene un estricto acoso sobre mi papá. Las visitas que empezaron la semana pasada, son custodiadas, y me revisan todo lo que le llevo”, contó Llorente hijo.
Ni escribir puede
Según precisó, al preso político le fueron retirados las hojas y los lápices que tenía para escribir en su celda, con las que creaba carteles y anuncios en protesta a la dictadura. El más reciente lo muestra en una fotografía que le tomó su hijo en una visita. Las paredes de su celda también las ha llenado de frases y consignas contra el régimen, lo que ha enfadado a los oficiales.
Redacción Cubanos Por El Mundo
