Realizar cualquier papeleo relacionado con viviendas en Cuba es un periplo para los solicitantes. La corrupción y la burocracia, forman un muro casi imposible de atravesar para el cubano humilde que sólo busca legalizar su casa, realizar modificaciones o simplemente venderla.
Según reporta Martí Noticias, se han visto casos en los que los solicitantes deben desembolsar cuantiosas sumas de dinero para que su trámite agarre curso.
Lo curioso es que las leyes cubanas están prestas a facilitar los procesos legales de cualquier índole en la Isla.
Jean Rodríguez García, es un cubano que lleva siete años tratando de procesar unos papeles en la Unidad de Vivienda, pero el resultado siempre es el mismo.
“Todo tiene su termino, pero ellos no cumplen con esos términos. Los documentos te llegan incompletos entonces no puedes realizar el proceso siguiente. Es algo ilógico”.
Este espiral burocrático y corrupto da pie para que incluso te quiten la casa, tal como sucedió con Agustín Palma Maza, a quien su propio hermano arrebató su hogar.
DE SU INTERÉS: Más promesas: Régimen afirma que construirá más de 60 mil viviendas cada año
“Yo salí de prisión y la casa donde yo viví y crecí me la quitó mi propio hermano. No me deja entrar. Un día me toca dormir en una terminal, en un parque”.
Agustín afirma que el dinero mueve influencias dentro de las Unidades de Vivienda lo que permite violar leyes sin que sean castigados de forma severa.
“Cuando tienes dinero, y le das dinero a ellos, aunque estés ilegal te ponen legal”.
Redacción Cubanos por el Mundo