La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), informó que es responsabilidad total del régimen cubano los daños ocasionados a grupos opositores, por lo que pide compensarlos, reseña EFE.
“La responsabilidad internacional del Estado cubano por la violación de los derechos a la libertad de expresión y asociación”
El informe presentado por el organismo se basa en los casos de Vladimiro Roca Antúnez, René Gómez Manzano, Martha Beatriz Roque Cabello y Félix Bonne Carcassés, quienes fueron detenidos en 1997 tras crear un grupo disidente por lo que fueron condenados por sedición, y liberados entre el 2000 y el 2002.
“concluyó que las sanciones penales impuestas a las víctimas son incompatibles con las exigencias del derecho a la libertad de expresión y el derecho a la libertad de asociación en una sociedad democrática”.
La CIDH expresó que el régimen intenta “criminalizar” la política opositora.
“La intolerancia de las autoridades cubanas hacia toda forma de crítica u oposición política constituye la principal limitación a los derechos a la libertad de expresión y asociación en ese país”.
“La Comisión consideró que, además de la dimensión individual del impacto de estas medidas sobre las víctimas, la criminalización que se evidenció ejerció un efecto intimidatorio o disuasivo (‘chilling effect’) sobre toda la sociedad cubana, pudiendo conducir a impedir o inhibir este tipo de opiniones y asociaciones”, según el informe.
Reparación de víctimas
El organismo recomienda al régimen iniciar un proceso de reparación de víctimas, o de los familiares sobrevivientes, por el daño causado durante sus arrestos y violaciones de derechos humanos.
“La Comisión recomendó a Cuba reparar a las víctimas y, de ser el caso, a sus familiares sobrevivientes, por el daño material e inmaterial sufrido en virtud de las violaciones establecidas”.
Redacción Cubanos por el Mundo