La prensa oficial cubana, esa que es pronta a defender a la “revolución” y sorda a las necesidades del pueblo cubano, dedica sus líneas para cuestionar la salud mental de la activista Rosa María Payá, líder de Cuba Decide y la Red Latinoamericana de Jóvenes por la democracia (RedLac), basándose en las afirmaciones del psiquiatra Carlos Bromley.
“Las personas que sufren trastorno psicopático de la personalidad, mienten con mucha facilidad y son muy hábiles para hacer de sus mentiras algo coherente”, aseguró el especialista peruano en relación a la presunta carta que Payá envió a Luis Almagro, Secretario General de la OEA, pero que ella misma desmintió haberla enviado.
La activista declaró que no es la autora de la carta que según los medios oficiales en la Isla, hizo llegar el pasado 4 de enero a Almagro pidiendo se ejecuten “planes” contra Cuba y Venezuela durante la VIII Cumbre de las Américas.
La aclaratoria de Payá parece incomodar al oficialismo, que la ha hecho blanco de críticas buscando desacreditar su labor en defensa de alternativas hacía una transición democrática en Cuba.
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Otra acusación
El artículo oficial asegura que entre otra de las mentiras de Payá está asegurar que su padre, el dirigente opositor Oswaldo Payá, fue asesinado por el régimen castrista, a quien responsabiliza por el accidente de tránsito en el que perdió la vida. No conforme con lo anterior, el autor del medio oficial señala a la opositora de tener una “enfermiza tendencia a la mentira” heredada de su padre.
“Mentir puede ser producto de un contagio psicológico de comportamientos en un determinado entorno social, donde todo el mundo miente, más aún cuando la personalidad no está bien estructurada o cuando se tienen determinadas debilidades morales, de principios o de valores”, fueron palabras de Bromley citadas en el texto.
Se describe al fallecido Oswaldo Payá como un conocido cabecilla contrarrevolucionario, que en 2002 aseguró haber reunido 11.200 firmas “para su engendro político Proyecto Varela”, pero que no pudo presentar la acreditación de los firmantes como electores con declaración jurada ante el notario porque “la mayoría eran falsas”.
Otros “mentirosos”
En el texto también se acusa a Donald Trump, Carlos Alberto Montaner, José María Aznar, Luis Almagro, Marco Rubio, Andrés Pastrana, Jorge Quiroga y Santiago Álvarez Fernández Magriñá, de ser “mentirosos, tergiversadores, inmorales y faltos de principios” responsables de “exacerbar” los “trastornos de personalidad” de Payá.
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Sorprende, tras casi 60 años de cinismo castrista, que se hable de una “enfermiza tendencia a la mentira” que no tenga que ver con los muchos engaños y desilusiones que ha generado el régimen cubano a su pueblo.
Es mentira decir que los cubanos viven bien. Es mentira decir que quieren seguir viviendo igual. Es mentira que más de medio siglo de socialismo hizo soberano y próspero al país. Es mentira que la cúpula estatal se preocupa por el pueblo. Es mentira que aman a Cuba, sólo aman su hegemonía gubernamental.
Es inaudito que un supuesto psiquiatra, sea capaz de evaluar dichos patrones en la oposición, sin reconocer primero “el trastorno” social, político y económico que ha vivido Cuba desde que se impuso el socialismo y toda su miseria corrupta, asesina de la calidad de vida y la libertad de los cubanos por décadas.
Redacción Cubanos Por El Mundo
