Ser un recluso en Cuba es la peor condición que podría tener cualquier ser humano en el país. Así lo testifica Jorge Enrique Guerra García, un joven parapléjico que no disimula su desprecio hacia el régimen cubano y su barbarie. Tiene años sin caminar y desde hace dos, comenzó a orinar sangre, sin que eso le preocupe al jefe del Puesto Médico de la prisión, que sólo se limita a decirle que no hay medicamentos.
“Sí fuera un familiar de los Castro, ese medicamento no me faltaría”, se quejó el enfermo penitenciario ante un indolente médico en la prisión, según el relato de otra víctima, Ovidio Martin Castellanos, preso político detenido hace ocho meses por ser miembro de UNPACU, liberado este lunes. Según Martí Noticias.
Según cuenta al recluso Guerra García, pese a su vulnerable condición, las autoridades le impiden hacer llamadas telefónicas o le cortan la comunicación, porque en varias ocasiones ha intentado exponer su caso a través de la oposición.
“De un promedio de mil hombres, la mayoría son jóvenes. Donde les dicen que van a pasar por escuelas, que es totalmente un fraude, no hay tales escuelas, que les van a enseñar ciertos oficios, les dan incluso diplomas sin saber siquiera poner un ladrillo”, dice Ovidio al describir su experiencia en las cárceles cubanas.
#Cuba En la tarde de ayer fue liberado, después de 8 meses de injusta prisión, el destacado miembro de la Dirección de #UNPACU Ovidio Martín Castellanos. Le acusaban de falso delito de atentado. UNPACU tiene medio centenar de activistas en prisión.
— José Daniel Ferrer (@jdanielferrer) April 21, 2018
Tortura en Mar Verde
El activista de UNPACU estuvo recluido en las prisiones de Mar Verde y Aguadores, luego de ser trasladado por varias unidades policiales, en medio de movilizaciones extrañas, tipo secuestro. Una vez en Mar Verde, pudo ver la crueldad encarnada en los oficiales y reclusos que se encargan de golpear a los reos.
“Los amarran con esposas y los golpean por cualquier tipo de gesto que haga el preso. Allí pude ver el caso de Frank David Jiménez, de 25 años de edad, que lo sacaron de una manera brutal y le dieron una paliza enorme. Los pelotones de guardia son organizados para imponer que ningún preso pueda quejarse por la mala alimentación que tiene, la falta de asistencia médica que hay en el lugar”, lamentó.
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Ante el ataque psicológico y las amenazas de los oficiales del régimen, el dirigente de UNPACU expresó en una ocasión:
“Usted me está amenazando y yo le voy a decir en respuesta a su amenaza ¡Abajo las cenizas de Fidel!, ¡Abajo Raúl! , ¡Abajo el comunismo! Y entonces ¡me tienen que matar!”.
Fueron esas emotivas palabras el motivo de su traslado a la prisión de Mar Verde.
“Hay presos con dolores, con situaciones de salud terribles, y hay algunos que tienen que ser operados e intervenidos quirúrgicamente, y llevan meses y hasta años y ellos, los funcionarios, se demoran, no les interesa esta cuestión”, denunció.
Antecedentes
Ovidio fue detenido tras un hecho confuso donde unos cuarenta activistas de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) compartían con sus familiares, y oficiales vestidos de civil llegaron al lugar para agredir a uno de los miembros y quitarle la cámara con la que filmaba la reunión.
El activista indicó que fue liberado a través una medida cautelar y no será juzgado. No tiene prevista ninguna acción judicial contra el estado argumentando la impunidad que reina en el sistema.
Redacción Cubanos Por El Mundo