El dictador norcoreano, Kim Jong-Un, y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, se reencontraron en la llamada Zona Desmilitarizada en el lado surcoreano y ambos prometieron trabajar por la paz en la península.
Según detalla la agencia Reuters, Kim, quien en los últimos años llevó a cabo una escalada nuclear que puso en vilo a todo el planeta, aseguró que en la península coreana “no habrá más guerra”.
Ambas Coreas afirmaron que trabajarán con sus aliados más poderosos, Estados Unidos y China, para buscar un acuerdo de paz “permanente” y “sólido”.
“Los dos líderes declaran ante nuestra gente y el mundo entero que no habrá más guerra en la Península de Corea y que ha comenzado una nueva era de paz”, dijeron los líderes coreanos.
Las declaraciones de los líderes incluyó el compromiso de buscar una reducción progresiva del armamento militar, cesar las hostilidades y transformar la frontera fortificada en una zona de paz.
La escena
Los medios que presenciaron el histórico encuentro aseguraron que a ambos líderes se les observó sonrientes e incluso bromearon entre ellos.
Caminaron juntos por la zona desmilitarizada.
Se espera que este encuentro sea la antesala a la reunión que tendrá Kim con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que será en las próximas semanas.
Moon acordó visitar Pyongyang a fines de este año, según la declaración.
Redacción Cubanos por el Mundo
