La podredumbre en el barrio Pogolotti, de La Habana, es insoportable. La inundación de aguas albañales es constante y no encuentran soluciones al problema pese a solicitar ayuda a las autoridades en diversas ocasiones. Así lo informaron sus habitantes a CubaNet.
José Prieto Blanco, vive inundado entre aguas putrefactas desde hace años sin que algún delegado o ente oficial le ofrezcan alternativas al problema sanitario que atenta contra la salud de grandes y niños en la comunidad.
“Tengo la casa llena de agua de excremento, no puedo entrar. Mi hija tuvo que irse y no puede venir. Cada vez que entro porque no tengo otro lugar para estar, debo ir por encima de las aguas albañales y la porquería”, relató.
Todos los afectados expresaron que las autoridades han sido notificadas de lo que ocurre, pero no hasta la fecha no han habido respuestas al problema.
“El gobierno no ha hecho nada, absolutamente nada por resolver el problema”, dijo.
Otros testimonios
Janny Prieto Xiqués, afectada, asegura que el estado es quien dispone de los recursos para arreglar la situación, más allá de la ayuda momentánea que de vez en cuando brinda a la comunidad.
“Aquí viene saneamiento de La Habana y su manguerona, chupa, chupa y chupa el agua, baja el nivel de la alcantarilla central y se van. Toda el agua retrocede hacia atrás y me llega al patio en mayor cantidad, con mayor fetidez y desechos. Es Inhumano estar aquí, ni de visita, no se puede parar uno en la entrada porque es realmente desagradable”, expresó.
La crisis de la comunidad empeora en cada lluvia. Al llover las fosas que contienen las aguas albañales colapsan por completo, inundando los patios y el interior de las casas aledañas.
“Estamos cansados de ir a pedir ayuda y no nos resuelven nada. Aquí hay niños chiquitos que son afectados por esta contaminación”, dijo otra vecina bajo anonimato.
Redacción Cubanos Por El Mundo