La candidata de Donald Trump para llevar las riendas de la CIA, Gina Haspel, se comprometió este miércoles a no reanudar el programa de torturas que la agencia puso en marcha tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, en los que ella misma se vio involucrada, de ser designada en el cargo por el Senado.
“Después de haber servido durante esos tiempos tumultuosos, ofrezco mi compromiso personal, claro y sin reservas, de que bajo mi liderazgo la CIA no retomará esos programas de detención e interrogatorio”, dijo Haspel ante el Senado.
Según reseña AFP, durante el año 2002, Haspel dirigió frecuentes torturas a detenidos quienes presuntamente pertenecían a Al Qaida en una prisión secreta de Tailandia.
LEA TAMBIÉN: Trump despide a Rex Tillerson de la Secretaría de Estado
La funcionaria de 61 años y subdirectora de la Agencia Central de Inteligencia, CIA, evitó condenar ese tipo de programa aplicados entre 2002 y 2005, período durante el cual ciudadanos extranjeros detenidos en lugares secretos en todo el mundo eran sometidos a torturas, en especial al llamado “waterboarding”, que simula un ahogamiento.
“Mirando hacia atrás, es claro que la CIA no estaba preparada para conducir un programa de detención e interrogatorio”, expresó.
Justificación
Asimismo, justificó las torturas diciendo que con ello se había ayudó a obtener “valiosa información” que permitió desarticular tentativas de nuevos atentados en territorio estadounidense.
“Como todos los que trabajamos en centros de antiterrorismo y en la CIA en esos años luego del 11 de Septiembre (de 2001), todos creíamos en nuestro trabajo”, dijo.
LEA TAMBIÉN: Nueva jefa de la CIA puede ser arrestada al visitar la UE afirma Snowden
Redacción Cubanos por el Mundo