Ana León, periodista independiente en Cuba, se disponía salir del país hacia Canadá para visitar a su familia cuando los funcionarios de la Inmigración y Extranjería la detuvieron e informaron que tenía prohibido salir del país de forma indefinida, según reseña CubaNet.
La periodista fue abordada en la terminal 3 del aeropuerto internacional José Martí de La Habana. La llevaron a la oficina de la Dirección de Identidad, Inmigración y Extranjería (DIIE); donde le informaron sobre la sanción.
La disposición es la de rutina para los casos que escoge la Seguridad del Estado: prohibición de salida por tiempo indefinido y sin causa legal que la justifique.
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El viaje de la periodista era de índole personal y sin implicaciones laborales. Pero las restricciones son por causa de su trabajo.
El pasado 26 de abril Ana León fue citada por la DIIE. Allí, un capitán de la Seguridad del Estado le advirtió que de seguir haciendo periodismo independiente podrían tomar medidas para no dejarla salir del país.
Perjuicio
La amenaza fue cumplida y además con perjuicios económicos para la periodista. Ni su equipaje pudo retirar por las presiones de los funcionarios para que salieran del aeropuerto.
Air Canadá le informó que su maleta se fue a Toronto. Quedaron en entregársela en las próximas horas. De no ser así, la periodista responsabiliza por los daños a la Seguridad del Estado Cubano; la DIIE y la aerolínea Air Canada.
Como es costumbre, mientras esa arbitrariedad sucedió, el canciller del régimen, Bruno Rodríguez, señaló en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que el “compromiso” de su país con las “garantías para el ejercicio de los derechos humanos”, está intacto.
Redacción Cubanos por el Mundo