El cuerpo de una extraña criatura fue descubierto en una playa de Gales, Reino Unido, por una mujer que paseaba a sus perros y se impactó al ver al espécimen que no logró identificar.
Beth Jannetta sacó su teléfono y le tomó fotos al cadáver en descomposición para enviarlo a unos científicos para que determinaran de que animal se trataba.
El esqueleto es de 1,52 metros de largo, tiene una cabeza alargada, mandíbula gigante y una cola sutil.
“Estaba caminando con mi perro cuando me topé con la criatura. Me pareció un cetáceo bien podrido”, reseña el portal Infobae. “Otros creen que es algo diferente, como un cocodrilo. Sería muy interesante descubrir de qué especie se trata”, agregó.
Los expertos aún no logran identificar a la criatura pero alegan que podría tratarse de una balle, un delfín o una marsopa.
El guardabosques de la Fundación Nacional para Lugares de Interés Histórico o Belleza Natural, Mark Hipkin, quien acudió al lugar para recoger los restos, afirmó que pensaba que era una marsopa.
“Tenemos marsopas llegando regularmente, así como delfines y focas. A veces, hasta ovejas”, añadió.
Por otro lado Dan Forman, científico de la Universidad de Swansea, asegura que tiene semejanzas con un cocodrilo, pero “seguramente no lo es”.
“La línea de su mandíbula sugiere que es un cetáceo como una ballena o un delfín”.
Redacción Cubanos por el Mundo