Duerme en la calle desde hace cinco meses. Minusválido, enfermo, sin libertad y con todo y eso el régimen le robó su casa. Orestes Valdivia León, vive en la terminal de ómnibus de la provincia de Sancti Spíritus y denuncia la pérdida de su vivienda por manos del régimen, según reseña Martí Noticias.
Valdivia León, oriundo de Jatibonico, calló en prisión por el delito de peligrosidad. Una vez dentro su condena se alargó y todavía está cumpliendo un año de libertad condicional. Cuenta que dentro de la prisión se enfermó de los nervios y se autoagredió en las piernas.
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Mientras todo eso ocurría, dejó su casa a cargo de unas personas. Denunció que esos individuos “armaron un complot con los del instituto de la vivienda del régimen para quedarse con la casa”.
“Inventaron una historia para quedarse con la casa. Dijeron que yo se las había vendido y me prohibieron denunciarlos. Me dijeron que no podía hacer denuncia porque estaba recluido”.
Sin justicia
Valdivia León, nunca pudo denunciar su caso a las autoridades.
“Si yo denunciaba el caso, cuando llegáramos a juicio ellos iban a perder. Por eso no me dejaron hacer denuncia. Me dijeron que por la comandancia no me querían ver más porque yo estaba recluido”, señaló.
El hombre toma medicación por una infección de riñones y padece del hígado. Su dieta debe ser especial, pero no la puede cumplir porque está en situación de calle. Gana una chequera de 192 pesos que equivale 7 dólares mensuales. Eso no alcanza para comer.
“Lo que pido al Estado es que reconozcan mi caso y que me otorguen una silla de rueda. Si hay tantas sillas de ruedas por allí, yo debería tener una. Yo la puedo pagar, yo la pago”, concluyó.
Redacción Cubanos por el Mundo