La llegada de la primera tormenta de la temporada, de Alberto, y su impacto en la producción, ya activaron las medidas oficiales que en cada contingencia parecen agravar más la situación de la población, que subsiste a la escasez de alimentos, medicinas e insumos básicos.
Según la prensa oficial, el Consejo de la Administración Provincial de Villa Clara “racionó el expendio de productos liberados en mercados paralelos y bodegas de productos alimenticios. De similar manera, acordó hacerlo en la Cadena de Tiendas CARIBE, CIMEX y Palmares”, dice la nota.
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Las autoridades del sector agropecuario fijarán los precios máximos cada trimestre, durante la etapa de recuperación de la Agricultura, lo que significa que tendrán carácter temporal.
Regulados
En Villa Clara por ejemplo, designaron al director de la Empresa Municipal “para regular y determinar las cantidades a vender, así como velar por el cumplimiento de las medidas sanitarias a adoptar”.
Las regulaciones buscan “evitar el acaparamiento y la especulación por parte de personas inescrupulosas” durante el periodo de contingencia derivado de las intensas precipitaciones, en las que el país perdió 1.500 hectáreas de frijoles y unas 10.000 hectáreas de otros cultivos.
Entre las pérdidas también se estima que alrededor de 5.000 hectáreas de arroz quedaron bajo el agua en Pinar del Río y otras 600 toneladas del cereal se dañaron en Ciego de Ávila.
Redacción Cubanos Por El Mundo
