Lo que hubo entre la cubana Julia Medina y su Healey Silverstone D10, fue amor a primera vista. Aunque poco sabía la mujer sobre el valor que tenía aquella reliquia automovilística que adquirió en 2013 siendo un amasijo de hierro en el abandono, años después vendrían las alegrías tras sacarle brillo y ponerlo a andar.
Este fin de semana, su “abuelito” se exhibió junto a otros carros antiguos, en el primer Salón Excelencias del Motor, en ExpoCuba, en La Habana, donde propios y extraños se deleitaron viendo el museo rodante de Cuba, en donde se conservan antiguos modelos automovilísticos que ya no se ven en América.
“Aún siendo un abuelito, es el bebé de la casa. Yo lo beso todos los días y por la mañana lo saludo. Yo tenía una noción elemental sobre el automovilismo, por eso no sabía nada sobre los Healey, así que comprarlo a su segundo dueño fue una inspiración para la que aún no tengo explicación”, afirmó Julia Medina, la orgullosa propietaria, a Xinhua.
Fabricado hace 70 años, llegó a la Isla en un lote de 100 fabricados entre 1948 y 1950, al igual que otro llegado al país, propiedad de un alto directivo de la compañía petrolera Shell.
Tiempo y dinero
Poner a rodar al Healey de Medina le costó dos años de búsqueda de repuestos, que no se encuentran en la Isla, así como de asesoría e inversión. Pieza clave en alcanzar la recuperación del auto fue contactar al Club Healey en Londres, una organización de aficionados a carros antiguos, quienes le facilitaron piezas y se las enviaron a Cuba.
Gracias a esa pasión, el carro de Medina se luce hoy por las calles de Cuba pese a no superar los 90 kilómetros por hora, aunque tiene capacidad para 160, pero su dueña prefiere prevenir y no forzar a la vieja máquina que tanto le costó reportenciar.
“El principal objetivo de este Salón es elevar la cultura del automovilismo en sentido general en Cuba, porque hay mucho tabú, pues la gente piensa que el automovilismo es solo competencia, es solo derrapar, es solo hacer chillar a las gomas”, dijo el periodista Willy Hierro, uno de los organizadores de la muestra.
Redacción Cubanos Por El Mundo