La muerte asecha a los venezolanos. La violencia desatada en ese país en los últimos años bajo el régimen de Nicolás Maduro sigue cobrando vidas inocentes, como la de Vanessa de Los Ángeles Tomasini Martínez, quien fue asesinada este viernes en Caracas con tan sólo 26 años de edad, mientras conversaba por teléfono con su madre, quien alcanzó a escuchar la trágica escena.
La joven salió muy temprano en la mañana a su trabajo, al Instituto de Artes Culinarias, donde laboraba como ayudante de cocina. Al llegar se sentó en un banquito de la plaza de la urbanización Santa Mónica, ubicada en la calle Pedro Emilio Coll, mientras esperaba a que abrieran el lugar. Estando ahí, conversaba con su madre por celular, donde fue atacada por un motorista.
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Según Caraota Digital, un hombre pasó en una moto frente a la mujer y unos metros más adelante giró y se estacionó muy cerca. Se bajó de la unidad y se le sentó al lado fingiendo conocer a Tomasini, donde le pidió sus pertenencias. La negación de la mujer a entregar el celular y la cartera inició un forcejeo en la que terminó con un cuchillo clavado en el corazón que le arrebató la vida.
Huída
El vigilante del Instituto se percató de lo que ocurría y comenzó a gritar, lo que hizo huir al asaltante sin llevarse nada.
Vanessa, quien estaba casada desde hace dos años, deja huérfana a una bebé de 9 meses. Su esposo, Jacob Garrido, se encuentra desconsolado y exige justicia a las autoridades.
El hecho transcurrió teniendo a su propia madre de testigo, quien escuchaba lo que ocurría al otro lado de la línea telefónica. Otra tragedia que se suma a las macabras estadísticas que se registran cada año en Venezuela por muertes violentas.
Redacción Cubanos Por El Mundo
