El reconocido periodista, Fernando Ravsberg denunció a través de su blog Cartas desde Cuba, que desde el régimen cubano le están colocando “trabas” para la renovación de su permiso de trabajo como corresponsal. Su acreditación no sería renovada, según alegato de las autoridades de la Isla, porque Publico, el periódico español donde trabajaba no lo había solicitado.
Sin embargo, ahora que ‘Le Monde Diplomatique’ presenta una petición de credencial para Ravsberg, le ponen impedimentos. Según informó, el pasado viernes introdujo la solicitud ante el Centro de Prensa Internacional, pues previamente le habían dicho que querían “prensa más importante”. Ahora resultaría no ser suficiente pues “se requieren muchos más trámites”.
“Quieren, nada más y nada menos, que los directores de Le Monde Diplomatique y de El siglo Europeo, vayan personalmente a las embajadas cubanas en París y Madrid para que les expliquen cuales son estos trámites, firmen un documento legal y paguen la certificación consular, para iniciar los trámites” denuncia.
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Dos funcionarios fueron enviados por Alberto González, director del CPI, para informarle que los trámites serían más engorrosos. “El procedimiento es totalmente atípico, nunca me habían pedido que los directores hicieran esa gestión y yo tengo experiencia, estuve acreditado para Radio Nacional de Suecia, BBC, TV Azteca, Público, además de haber trabajado con permiso para la cadena Telemundo de EEUU”.
“En realidad, buscan un contacto directo para presionar al medio, tal y como han hecho en otras ocasiones. Le dan a entender al director del medio que Fernando Ravsberg está muy mal visto en Cuba y que acreditarlo podría afectar la relación del periódico con el gobierno cubano”.
Trabajo no falta, sabotaje sobra
Asegura que actualmente no enfrenta ninguna adversidad para conseguir ofertas de trabajo, sin embargo, son sus “adversarios” quienes actúan en sabotaje, en una guerra que asegura, lleva más de 14 años.
“Primero me prohibieron seguir con la cadena Telemundo, con la cual trabajé años. No fue un problema político, habíamos sido los primeros en filmar la Escuela Latinoamericana de Medicina y en entrevistar a un terrorista salvadoreño que acusó delante de la cámara a Posada Carriles de los atentados a los hoteles”.
“No me falta trabajo, lo que ocurre es que no me quieren acreditar aquellos que mueven los hilos de la prensa tras bambalinas, los que deciden sobre la vida de los periodistas subiendo o bajando el pulgar como Cesares mediáticos, los que odian el periodismo pisa-callos” puntualiza.
Redacción Cubanos por el Mundo
