La célebre actriz cubana Natalia Herrera, murió el martes a sus 95 años en su querida ciudad de La Habana, lugar que durante varias décadas la vio brillar.
Esta mujer se destacó por sus habilidades histriónicas en el teatro, la televisión y en el baile. Nació el 28 de mayo de 1923 en la barriada de Lawton.
Sus inicios fueron muy tempranos. Cuando apenas tenía siete años mostró facultades para la actuación y debutó en una función de teatro cuando tenía ocho.
Más tarde cantaba y bailaba en la compañía teatral Pedro Salvá. En 1937 fue seleccionada para participar de La Corte Suprema del Arte, uno de los programas más famosos en la historia de la televisión cubana.
Tras eso se impulsó en la radio y la televisión y fue cuando el reconocido Obdulio Morales la tomó bajo su ala.
En la emisora la emisora CMQ fue protagonista de programas como El alma de las cosas y entre 1943 y 1944 se destacó en el programa de radio Rincón Criollo.
Entre sus trabajos más notorios se encuentran su participación en la novela El derecho de nacer, de Félix B. Caignet y en el programa radial La Guantanamera, de la emisora Cadena Roja.
En la década del 90 fue parte del elenco de Día y Noche, Sabadazo, Contacto y En la noche, entre otros reconocidos espacios. Sus actuaciones hicieron bailar, reir y disfrutar a varias generaciones de cubanos.
Redacción Cubanos por el Mundo