Una nueva controversia se enciende sobre el tema migratorio y la separación de familias liderada por la gestión del presidente Donald Trump con su política “Tolerancia Cero”.
Una madre inmigrante separada de su hijo de 11 años en mayo pasado, introdujo este lunes una demanda por el acoso que el menor sufrió durante su encierro en un albergue de Chicago, durante dos meses aproximadamente.
“Un poco más y me dan a mi hijo en una caja de madera”, denunció Otilia Asig Putul a ElNuevoHerald, detenida en mayo como delincuente por agentes en la frontera con México, delante de su hijo Geremy, a quien trasladaron a un campamento para vivir una pesadilla.
La mujer, que llegó a la frontera ilegalmente el 9 de mayo por Arizona desde el Petén, en el norte de Guatemala, con su hijo y un sobrino para pedir asilo, ahora quiere justicia por los daños causados a su pequeño, por lo que presentó este lunes una demanda en Miami por negligencia contra la compañía Heartland Human Care Services, a cargo del albergue.
“Lo que más recuerdo es cuando me dijeron que me iban a quitar a mi hijo y me esposaron de manos y pies. Rogué a los guardias que no dejaran que mi hijo me viera esposada. Hice que se diera la vuelta. ¿Qué iba a pensar de su madre?”, confesó la mujer.
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Pesadilla
Desde su llegada al albergue, Geremy fue acosado por otro menor de 14 años llamado M.A., hasta el punto de causarle una herida en la cabeza al hacerlo caer. La madre de Geremy nunca supo del incidente ni que a su hijo lo habían trasladado al hospital para suturarle la herida.
El menor rogó a los guardias separarlo del agresor pero la respuesta obtenida era “No te quejes más”.
La mujer fue liberada a mediados de junio por las autoridades, tras lo cual pudo reunirse con su hijo nuevamente en Miami, donde inició la demanda.
Redacción Cubanos Por El Mundo
