El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de la ONU (CERD), pidió al régimen de Cuba rectificar sus políticas contra el racismo para impedir que activistas y personas afrodescendientes sean víctimas de discriminación, informa Diario de Cuba.
En tal sentido, el organismo exige un tratamiento a los activistas que luchan contra el racismo, hasta las garantías para cubanos afrodescendientes en el mundo laboral, el freno a los abusos de la Policía y la mención explícita de la discriminación racial en la Constitución y el Código Penal.
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El informe dado a conocer este jueves revela que en La Habana se han llevado a cabo casos de “acoso, hostigamiento, intimidación, amenazas, descalificación y criminalización” contra defensores de derechos humanos, periodistas y otras personas que trabajan contra la discriminación racial por parte de los propios funcionarios de la dictadura, algo que genera “profunda” preocupación en el CERD.
“La restricción impuesta a los defensores de derechos humanos para viajar y poder participar del examen llevado a cabo con relación al informe presentado por el Estado genera profunda preocupación”.
El 15 y 16 de agosto, el organismo analizó el escenario cubano en torno a este tema, pero el régimen impidió que los activistas invitados acudieran a Ginebra, tal como sucedió con Juan Antonio Madrazo Luna, coordinador del independiente Comité Ciudadanos por la Integración Racial (CIR).
En por eso que el Cominté pidió al castrismo investigar los hechos y “todo acto de acoso, hostigamiento, intimidación, amenazas, descalificación y criminalización contra defensores de derechos humanos, y castigue debidamente a los responsables”.
A su vez pidió la eliminación de “restricciones arbitrarias” para que los activistas puedas asistir y participar en las reuniones de trabajo que promueve la ONU.
Como hizo el Consejo de Derechos Humanos al realizar el Examen Periódico Universal de Cuba en mayo pasado, el CERD dijo estar “preocupado por la falta de una institución nacional encargada de la protección y promoción de los derechos humanos”, y llamó al régimen cubano a establecer una entidad de ese tipo, “independiente”, que dentro de su trabajo dé “seguimiento a la lucha contra el racismo y la discriminación racial”.
Redacción Cubanos por el Mundo
