Manifestantes nicaragüenses siguen denunciando la injerencia cubana en las fuerzas represivas del régimen de Daniel Ortega. Corby Dave Hodgson García, de 30 años, decidió el 19 de abril unirse a las manifestaciones y luchar por la libertad de su país, pero el costo fue alto para él.
El 24 de julio fue capturado por la policía y llevado a una celda de la prisión conocida como El Chipote en Managua, informa La Prensa.
Al llegar fue recibido a golpes. Lo obligaron a desnudarse, atentando con su dignidad y luego asegura que “paramilitares cubanos” lo torturaron.
“Me desnudaron completamente y me obligaron a hacer 100 sentadillas y una mujer me pegaba en mi cara que ya estaba inflamado de los golpes que me habían dado en la UNAN los policías y paramilitares cubanos”, comentó.
Hodgson afirma que no logró ver a sus torturadores, pues al momento de golpearlo o quemarlo le tapaban la cara, pero si reconoció el acento caribeño.
Le daban con los puños cerrados para lo dejar marcas.
“Esas celdas son como el infierno, allí ellos (policías) no tienen que torturarte físicamente para sentirte torturado porque las celdas en sí ya son una tortura. Son oscuras, es supercaliente y demasiados zancudos, la cama es de madera pero en mi cama habían unos clavos salidos como de media pulgada y no podías acostarte” recordó.
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El joven huyó de Nicaragua por puntos ciegos ya que si intentaba salir por avión o por las fronteras terrestres sería detenido por las autoridades nacionales.
Redacción Cubanos por el Mundo
