La costa sureste de los Estados Unidos sigue viviendo los estragos causados por el huracán Florence. Las autoridades indicaron que el número de muertes relacionadas con el meteoro se incrementó a 13, mientras este sigue debilitándose conforme se adentra en el territorio.
Después de que se informase de la muerte de cinco personas debido a Florence este viernes, cuando el ciclón tocó tierra como huracán de categoría 1 en Carolina del Sur, el sábado la cifra aumentó hasta trece.
Se conoció que un hombre y una mujer murieron por una intoxicación de monóxido de carbono por el uso de un generador eléctrico en su vivienda en el condado de Horry, en el Carolina del Sur.
Otra pareja murió luego de que su casa en Fayetteville, en Carolina del Norte, se incendiara.
Tres personas más murieron en el condado de Duplin, debido a las “riadas y balsas de agua en las carreteras”.
Ese mismo día se conoció que una mujer falleció en Carolina del Sur después de que su automóvil chocase con un árbol que había caído sobre la carretera.
Estas muertes se suman a las cinco conocidas el viernes, entre ellas una madre y bebé que fallecieron debido a un árbol que cayó sobre su casa en Wilmington.
Más de un millón y medio de personas recibieron órdenes de evacuar sus viviendas en las costas de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia, pero muchos miles decidieron quedarse y afrontar el peligro en casa, en primera línea del frente.
Redacción Cubanos por el Mundo
