Exiliados cubanos y venezolanos protestaron frente al restaurante del reconocido chef turco Salt Bae, ubicado en el 999 de la avenida Brickell en la ciudad de Miami.
Los manifestantes mostraron su indignación luego de que el chef le hiciera reverencia al dictador Nicolás Maduro, quien se dio un festín en su restaurante de Estambul, Turquía.
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Las redes sociales estallaron al ver a Nusret Gökçe, abrazando, alimentando y hasta regalándole cigarros a Maduro.
José Antonio Colina, fundador y presidente de Veppex, expresó sentir una “profunda rabia” al ver como Maduro se deleitaba con los cortes hechos por Salt Bae.
“Sentí una profunda rabia e indignación ver como el responsable del éxodo de millones de personas que en este momento están buscando un mejor destino en otros países porque en Venezuela no se puede vivir, esté comiendo como si fuera un sultán o un jeque”
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Colina indicó que pedirá revisar la legislación del estado de la Florida que prohíbe a empresarios tener relaciones o comercios con el régimen de Venezuela.
“Maduro mostró lo que es, una basura humana. No le importa verse como un sultán, comiendo muy bien, mientras el pueblo que supuestamente él lidera se está muriendo de hambre. Demuestra por qué razón la gente no lo reconoce y lo rechaza y por qué tenemos que sacarlo del poder lo más pronto posible” compartió Colina.
Para concluir, el opositor indicó que es necesario que la comunidad internacional se una para hacerle frente al régimen chavista.
“Es necesario que la comunidad internacional se active con los acuerdos de cooperación, además de utilizar la fuerza y ayudar a un sector de la oposición venezolana para intervenir el estado fallido gobernado por narcotraficantes y terroristas y así, poder deponerlos”.
Redacción Cubanos por el Mundo
