Keiko Fujimori, ex candidata presidencial de Perú, fue enviada a prisión por la justicia de su país tras ser señalada de recibir aportes ilegales por parte de la brasileña Odebrecht, lo que amenaza su aspiración de ser de nuevo candidata presidencial en 2021.
La hija del anciano dictador Alberto Fujimori, deberá estar 36 meses apresada, luego de que el fiscal anticorrupción así lo pidiera ante el juez Richard Concepción Carhuancho, detalla la agencia AFP.
La única medida necesaria en su caso es indudablemente la prisión preventiva, pues ella ha interferido en los poderes del Estado, como el Congreso, y ha intentado obstruir la justicia.
Keiko de 43 años, fue arrestada tras abrazar a su marido, Mark Vito Villanella, a quien le corrían las lágrimas, antes de ser conducida a prisión por varios agentes de policía.
“Esto ha sido un linchamiento público”, declaró llorando Villanela
El magistrado indicó que existía la “sospecha grave” de que Keiko dirigía una “organización criminal de facto que se ha enquistado dentro del partido” fujimorista, que blanqueaba dinero de origen ilícito.
La orden de prisión preventiva fue pedida por el fiscal José Domingo Pérez, que la acusa de recibir 1,2 millones de dólares aportados en forma ilegal por la cuestionada constructora brasileña para su campaña de 2011.
La abogada de Keiko, Giuliana Loza, dijo que presentó de inmediato una apelación verbal.
“Vamos a sustentar por escrito la próxima semana”, indicó. El jueves y viernes es feriado para los servicios públicos en Perú.
Redacción Cubanos por el Mundo
