Banderas, pancartas, pitos, fotos. Esas son algunas de las pertenencias que varios cubanos residentes en Miami embarcaron en los autos y autobuses rumbo a Washington para participar en la Marcha de los Prohibidos, que pretende exigir al régimen de Cuba el cese de sus políticas excluyentes contra los exiliados.
La protesta se realizará frente a la embajada cubana en la capital de Estados Unidos. Muchos afirman que los mueve la esperanza de que en Cuba haya un cambio verdadero.
Aylin Campos, una de las asistentes a la marcha, afirmó, antes de subir al autobús, que “solo queremos que Cuba cambie”.
“Queremos a nuestro país. Esta marcha es para darle voz a los cubanos que no pueden expresarse”.
La marcha, convocada por el opositor cubano Eliécer Ávila y diferentes personalidades cubanas, promete envíar un claro mensaje al castrismo.
Enrique Rivero, uno de los encargados de organizar la protesta, informó que los autobuses salen con aproximadamente 50 personas, aunque no especificó cuántos han salidos.
“La marcha será a la 1:00 pm y luego al finalizar la marcha, vamos a tener una actividad para unirnos”.
Esta marcha tiene como objetivo exigir al régimen libertad para entrar y salir de Cuba, un pasaporte a precio accesible, voto directo para elegir presidente y el fin de la dinastía castrista.
José Quiñones, afirma que “no me importa caer en el departamento de los prohibidos”, pues afirma que lo hace “ con las ansias de liberar a Cuba”.
Por su parte, el régimen afirmó que aquellos que participan en esta marcha son “mercenarios”.
Redacción Cubanos por el Mundo
