El mandamás castrista, Miguel Díaz-Canel, pidió a los cubanos que fueron víctimas del tornado que azotó a La Habana el pasado domingo “paciencia y comprensión” mientras que estos deambulan por las calles.
Díaz-Canel afirma que el daño fue “muy grande” y que repararlo tomará tiempo. Algo que pudo haber sido previsto si se hubiesen tomado las medidas necesarias para la reparación de las viviendas en la capital a tiempo.
“Vamos a estar trabajando intensamente durante meses”, aseveró.
Exhortó además a los funcionarios a apegarse a su humanidad y no ser tan duros con los damnificados, pues estos estaban expuestos a mucho estrés al verse sin hogares, sin comida y sin dinero.
Indicó además que pese al daño dejado por el fenómeno, el 500 aniversario de La Habana se llevará a cabo.
“También será como parte de la celebración. Se van a levantar obras más hermosas donde el tornado dejó destrucción”
El sucesor de Raúl Castro insistió que la Marcha de las Antorchas en La Habana, fue un gesto “unitario” en medio de tanto desastre.
Además, acusó a sus “enemigos” de querer destruir y confundir a la población.
Cifras
Según los datos oficiales más recientes, dados a conocer este miércoles, el tornado del pasado 27 de enero sufrido por varios municipios habaneros dejó seis fallecidos, 195 heridos, y más de 5 mil viviendas dañadas, de ellas más de 500 con derrumbes totales y más de 700 con derrumbes parciales.
Casi 10 mil personas tuvieron que dejar sus hogares, la mayoría hacia casas de familiares y una cantidad menor hacia albergues estatales. Más de 900 familias habían recibido ya los materiales necesarios para la reconstrucción de su casa, y 289 se consideraban ya “casos resueltos”.
Redacción Cubanos por el Mundo
